LA SERIE DIVERGENTE: INSURGENTE crítica

Insurgente, segundo episodio de Divergente en el que a la prota sólo le falta el arco y las flechas

■ RAY ZETA

La serie Divergente es junto a la saga Los juegos del hambre el claro exponente actual de cine fantástico para adolescentes (o digamos mejor pre-adolescentes), nacido a partir del éxito obtenido por Crepúsculo, con todo lo negativo que eso conlleva. Cine fantástico, como explicamos en el artículo anexo, destinado a niñitas pre-púberes dedicadas a forrarse las carpetas y las paredes de su dormitorio con fotos y pósters de los actores juveniles guapetones de moda, más interesadas en ver una historia de amor protagonizada por una adolescente tímida y feúcha con la que identificarse, y un chico mayor gupetón y cachitas con pinta de quaterback de instituto (o sea con el que todas sueñan), que en ver una peli de cine fantástico, por mucho que la historia gire en torno a una sociedad futurista distópica con un gobierno dictatorial que divide a la población en cinco facciones.

Porque al igual que ocurre en sus películas primas-hermanas de subgénero (el "fantasteen") comoCrepúsculo, La huésped o Los juegos del hambre, la trama fantástica no es más que un pretexto al servicio de un folletín romántico, utilizada sin la más mínima coherencia para que ejerza sólo de marco ambiental y poder colarla como película fantástica, aunque de fantástico real sólo tenga la sinopsis y el póster. Hay cinco facciones, sí, pero en vez de estar mínimamente pensadas como intentaría hacer cualquier producción fantástica con ánimos de resultar creíble, se nota que aquí han sido inventadas con el único fin de definir a la protagonista como quiere su público potencial aunque resulten ridículas: Abnegación (ayudan al prójimo), Cordialidad (siempre están felices), Verdad (siempre dicen la verdad) y Erudición (los que más saben) son cuatro de ellas.

"Dicen los productores que o batimos a Los juegos del hambre o nos echan"

Y luego está Osadía, que es la que más mola. No se rigen por ninguna ley más que la suya, son guapos, intrépidos y enrrollados, trepan por edificios en vez de tomar el ascensor, saltan de trenes en marcha en vez de apearse en la estación, y aprenden técnicas de disparo y combate. Ustedes mismos, si tuvieran que elegir una universidad donde matricularse, ¿cuál elegirían? ¿La integrada por cuatro tíos sosos estudiosos que de tanto estar en la biblioteca no saben lo que es un bar, o la que está formada por estudiantes marchosos y enrrollados con fama de organizar fiestas a tuti pleni? La segunda claro, como hace la protagonista, aunque por tradición familiar esté llamada a formar parte de otra facción. Lo que compone otro punto de identificación con su público, el de la adolescente incomprendida que busca su propio camino rebelándose contra imposiciones familiares.

"Cine fantástico destinado a niñitas pre-púberes dedicadas a forrarse las carpetas y sus dormitorio con fotos y pósters de los actores juveniles guapetones de modas"

Porque las películas que siguen este línea, y la serie Divergente no es una excepción, sólo busca empatizar con su público por medio de la identificación. Y como su público es el adolescente femenino, la protagonista es una adolescente llena de inseguridades y miedo a no estar a la altura de las circunstancias (y encima como es divergente y no encaja en ninguna facción, se siente un bicho raro). Eso en la primera parte, porque en esta segunda su condición de divergente la convierte en la Elegida para derrotar al Consejo (¡tócate las pelotas!). Una Elegida tan poco creíble como un pitufo haciéndose pasar por Hellboy, pues por mucho que quieran vendernos la moto de que la frágil protagonista de la primera parte ha tomado conciencia de su condición y se ha convertido en una soldado letal, mientras la interprete Shailene Woodley no parece más que Caperucita yendo a casa de su abuelita.

"Nuestra única esperanza es dividir el capítulo final en tres partes y no dos"

Pero eso es lo de menos, ya que su historia de amor con Theo James se consolida, y a fe de Kuato que eso es lo único que importa. Por eso no hace falta desarrollar la trama que explica la lucha contra el Consejo, aunque sea la principal en esta secuela igualito como lo es en Los juegos del hambre 3. Basta con mostrar a su dirigente Kate Winslet aún más cabrona que en la primera parte, y sacarse de la manga un ejército de abandonados y el personaje sorpresa interpretado por Naomi Watts. La cuestión es ir mareando la perdiz durante dos horas sin que pase nada y dejar el ataque final para el último capítulo. Un último capítulo que siguiendo el ejemplo de la citada Los juegos del hambre (y Crepúsculo antes que ella) se estrenará en dos mitades para seguir retorciendo el cuello de la gallina de los huevos de oro hasta dejarla seca.

Y es que como he dicho, los elementos fantásticos son aquí pura paja de relleno, y más aún incluso que en la primera parte, ya que en la primera entrega presentaban al menos las facciones y la sociedad futurista, pero como en esta segunda ya las conocemos, no se molestan en seguir profundizando en ellas y se basan estrictamente en, por este orden, la historia de amor como no podía ser de otra manera, y el anuncio de un ataque al Consejo que nunca llega. Otro bluff para el cine fantástico pues, enmarcado dentro del "fantasteen" (y van...), que sigue amasando millones en taquilla mientras los fans del género de toda la vida apretamos los dientes y nos tiramos de los pelos al ver que esta moda no tiene fecha de caducidad. ¿Habríamos pensado hace unos años que el cine fantástico quedaría relegado a la categoría de género ñoñito para niñitas tontitas? Ni siquiera siendo divergentes.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Condenada a alforfones

Recomendada por Kuato a: niñitas que forren sus carpetas con fotos de Auryn y en su dormitorio tengan pósters de Justin Bieber.

No recomendada por Kuato a: quien aún considere que el cine fantástico no es vampiros que brillen a la luz del sol y hombres lobos cachitas que vayan luciendo musculitos toda la película para el delirio de sus fans.

Ego-Tour de luxe por: que a cada nueva película, esté más cerca la debacle de este subgénero para teens por saturación. Paciencia, que algún día llegará...

Atmósfera turbínea por: que encima estrellas de la talla de Kate Winslet y Naomi Watts se avengan a participar en estas películas poniendo la cara y parando la mano.

■ LA SERIE DIVERGENTE: INSURGENTE. Estreno en Venusville: 02/04/2015