A 47 METROS crítica: Colega, ¿dónde está mi salvavidas?

A 47 metros, otra peliculita veraniega de tiburoncitos juguetones como fue Infierno azul

■ CASTOR TROY

A 47 metros es el último thriller del director Johannes Roberts, conocido también por dirigir EL otro lado de la puerta, que era un truño de cuidado. La premisa básica de la película recuerda al largometraje Infierno azul, estrenado el año pasado, que contaba la supervivencia de una chica contra un “amigable” tiburón. Al igual que lo que fue un vehículo de lucimiento para Blake Lively, la esperanza de A 47 metros es crear una película de serie B para los amantes del género y poder disfrutarla en los cines. Y aunque consigue aprobar en sus intenciones, todavía deja mucho que desear, ya que A 47 metros es un thriller de supervivencia decente, pero nada especial, que es poco más que entretenimiento de cine veraniego.

Los problemas más importantes de la película están en el guión. Muchos de los papeles son totalmente planos y delimitados, con poca cantidad de construcción (básicamente todos los secundarios). Las protagonistas Mandy Moore y Claire Holt trabajan como hilo conductor para que los espectadores experimenten los acontecimientos indirectamente a través de ellas. Moore y Holt hacen un buen papel en sus respectivas partes, aunque no hay mucho que hacer con el pánico y el grito que pueda ser de molestia para el espectador en lo que se refiere a su actuación. La historia principal carece además de nivel emocional, lo que provoca que  las emociones sean en gran medida superficiales y anticlimáticas.

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La película está diseñada para ser tener una narrativa sencilla y el realizador se toma a pecho esto último. Donde el director si tiene éxito es en el aspecto técnico, o sea en la elaboración de las escenas de terror entre los tiburones y sus presas. Johannes Roberts emplea abundancia de primeros planos, dando un aire de claustrofobia y temor. A pesar de que ocasionalmente la acción puede ser difícil de seguir, pues algunas escenas pueden provocar un poco de mareo por el movimiento nervioso de la cámara, es un estilo agradable pero puede hacer que el público se sienta incómodo.

"A 47 metros es un thriller de supervivencia decente, pero nada especial, que es poco más que entretenimiento de cine veraniego"

Los escenarios de poca luz creados por el director de fotografía también son eficaces, ya que le dan a la película sensación de imprevisibilidad. Por lo general no hay ninguna advertencia sonora para cuando un tiburón llega, destacando la desesperanza y el peligro de la situación de Mandy Moore y Claire Holt. Con unos 90 minutos de duración, Roberts crea un ritmo sólido que no tiene ningún altibajo o sensación de aburrimiento. También merece un punto positivo el no abandonar nunca las otras amenazas, como los tanques de oxígeno, para mantener la tensión en todas partes.

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Lo que termina llevando a la película de nuevo a ser un simple entretenimiento, es que las elecciones de las protagonistas para escapar de la jaula son totalmente arbitrarias en lugar de naturales, para que la película siga funcionando y de a los espectadores motivos para preocuparse por lo que sucede en la pantalla. El primer acto de la película es particularmente descuidado en su ejecución, o sea todo lo que ocurre para que ellas acaben en una jaula en el fondo del mar, esperando que llegue el tiburón para animar la fiesta. También el acto final es un batiburrillo de falsos finales o giros de guion que pueden ser aceptados de buen grado o provocar un cabreo.

A 47 metros sabe cómo ofrecer emociones de terror y pánico en el espectador, pero hay poco detrás de ellas para que la película sea memorable, como sí es Infierno azul. Será un buen limpiador de preocupaciones para los aficionados al género en busca de un descanso de blockbusters de grandes presupuestos, pero a menos que uno sea un fan de este tipo de películas con tiburones cabreados en busca de carnaza, no es una elección para el espectador medio una vez esté delante de la cartelera.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Dos Caras Harvey

Recomendada por Kuato a: fans de las películas de tiburones o de buenas escenas de claustrofobia o tensión mientras disfrutan del aire acondicionado en los cines.

No recomendada por Kuato a: los que busquen una buena historia o SharkNados, Megatiburones etc…

Ego-Tour de luxe por: que no avisen con ningún tipo de señal a cuando ataca el tiburón (ya sea visual o sonora) puede provocar algún salto de la butaca.

Atmosfera turbínea por: todo el elenco de secundarios que aparecen (con un petadísimo Matthew Modine), que tienen menos presencia que los maniquís de cualquier escaparate de una tienda.

■ A 47 METROS. "47 Meters Down" (2018). Dirección: Johannes Roberts. Guión: Johannes Roberts y Ernest Riera. Reparto: Mandy Moore, Claire Holt, Matthew Modine, Chris Johnson y Santiago Segura. Estreno en Venusville: 21/07/2017.