EL DESCONOCIDO crítica: ¡¡¡Booooooooomba!!

El desconocido, un Speed a la española con Tosar conduciendo un coche en vez de un autobús

■ ROBERT THORNHILL

Ya hace tiempo que el cine español le puede mirar sin complejos a la cara a la maquinaria económica de Hollywood en cuanto al género del terror se refiere, sobre todo desde que Alejandro Amenábar con su ópera prima Tesis y esa cara B de El sexto sentido que fue Los otros, nos demostrara que no necesitamos hermandades universitarias Made in America o casitas abandonadas al lado del lago asediadas por psicópatas sanguinarios para hacernos pasar un mal rato. Podíamos crear historias con personajes patrios más cercanos sin tener que compadecernos de l@s guachis universitarios yanquis víctimas de los más terribles matanzas.

Luego vendrían REC y sus secuelas, El orfanato, Frágiles, Mamá, Caníbal y todo un reguero de películas que bajo la plataforma publicitaria que supone el Festival de Sitges, han logrado hacerse un hueco en las carteleras con dignidad demostrando que los guionistas españoles pueden tener ideas la mar de barrocas para acojonar al público sin recurrir a la adaptación de formatos orientales, consiguiendo de paso llenar unas salas que llevaban años huyendo del cine Made in Spain producto de la sodomización provocada por esos dramones de Garci que aburrían hasta a los camellos.

"Hay que joderse, Keanu Reeves con Sandra Bullock y yo con Elvira Mínguez..."

Más ha tardado en explotar el tortuoso género de thriller en el que ha habido píldoras de calidad como Carne de neón, Celda 211 o Grupo 7, o otras bastante aceptables con los omnipresentes Belén Rueda y José Coronado, como Los últimos días, No habrá paz para los malvados o El cuerpo, aunque la verdad es que no nos llegaron a enamorar ni hacernos olvidar esos thrillers americanos fabricados por y para que uno se siente en la butaca y no le den den ganas de levantarte.

Pero vaya, parece que la madurez ha llegado también a este género que si el año pasado nos sorprendiera con esa pequeña obra maestra como La isla mínima, emulando al mejor Fincher y dando la réplica Made in Spain a la entonces serie de moda True Detective, con El desconocido ya nos adentramos en ese cine hitchcokniano que pensábamos que solo se hacía al otro lado del charco, optimizando los  mínimos elementos posibles para crear un suspense sostenido durante toda la película.

"Es el tipo de cine palomitero como Imparable del añorado Tony Scott o Última llamada de Joel Schumacher"

Siguiendo las enseñanzas del maestro del suspense, se van creando mcguffins obligando al espectador a engancharse a la peli pendiente del incierto futuro de un banquero al que le han puesto una bomba en un coche sobre el que gira toda la acción, manteniendo Dani de la Torre la tensión durante los 100 minutos que dura la peli como si fuera la versión española de Speed. Se nota que De la Torre se ha empapado de ese cine minimalista, ruidoso y resultón, que con unos pocos mimbres logra enganchar al espectador y no soltarlo hasta que acaba la peli. Es el tipo de cine palomitero como Imparable del añorado Tony Scott o Última llamada de Joel Schumacher, dos ejemplos de buen cine con un guion hecho para ir dando cuerda a la película y que el ritmo no pare.

Y si en el cine de Michael Bay y del pequeño de los Scott aprovechan cualquier resquicio de la trama para inundar la pantalla de uniformados militares armados hasta los dientes con sus indispensables helicópteros, no se queda corto De la Torre. Difícil sería buscar una película española con tantos miembros del cuerpo nacional de Policía, que quedan perfectos llenando el encuadre de la pantalla, pero que siguiendo la estela de ineptitud marcada por los militares yanquis, su trascendencia a la práctica es nula salvo dar vidilla con sus persecuciones inanes tras el coche-bomba.

"Sí, clavaditos a los agentes Mulder y Scully de Expediente X, ya lo ven"

Aparte de un como siempre convincente Luis Tosar, uno de los puntales sobre el que se sostiene tan bien El desconocido es la presencia de una mujer policía a la española interpretada por Elvira Mínguez, con una entrada en escena magistral con un travelling de cerca de un minuto siguiendo su estela hasta que la cámara se revuelve para mostrarnos un personaje que nos recuerda a la Dana Skully de Expediente X o a la Teresa Lisbon de El mentalista por su sequedad, dureza y dudoso atractivo.

Si a unos personajes atractivos (excepto ese odioso niño al que dan ganas de matarlo) les añadimos una trama donde la motivación del criminal es muy moderna, quedando los bancos y sus empleados muy mal parados, el resultado final es un thriller con todos los tics americanos que han sido necesarios, incluido ese glorioso afán de entretener al espectador y en que todo nos suena muy cercano.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia:  Copas de Yate

Recomendada por Kuato a: los que tienen como obras de cabecera El Diablo sobre ruedas de Spielberg, Speed o Breakdown, y a los que aun lloran la muerte de Tony Scott.

No recomendada por Kuato a: los que se dedican a buscar gazapos o agujeros de guion porque aquí encontramos alguno que otro… ¡Pero qué diablos!, Gladiator está llena de gazapos y a todos nos parece una obra maestra.

Ego-Tour de luxe por: esos movimientos rápidos y eléctricos de cámara made in Scott, con planos picados y travellings circulares que crean movimiento aunque no esté pasando nada. Gran De La Torre.

Atmósfera turbínea por: ya puestos a poner una mujer policía como protagonista, podían elegir una con más sex-appeal… Esas Angelinas Jolie o Ashley Judd eran grandes polis y estaban para comérselas.

■ EL DESCONOCIDO. Estreno en Venusville: 25/09/2015