Categorías

IT crítica: Aquellos terroríficos años

Adaptación definitiva del IT de Stephen King con sabor ochentero a modo de Stranger Things

CHEMA PAMUNDI

Más de tres décadas después de su publicación, "It" sigue siendo la novela definitiva de Stephen King. Por ambición, por calidad literaria y por personalidad. Hasta ese punto de su carrera, el escritor de Maine había logrado su fama sobre todo como renovador de mitos clásicos del terror: vampiros, fantasmas, licántropos, personas con poderes psíquicos... Sin embargo, en "It" creó algo nuevo. Bebiendo lo justo de Lovecraft y su concepción del horror cósmico, inventó una mitología propia y personal, algo que de algún modo conllevaba despedirse de esos monstruos canónicos que había alimentado en obras anteriores (el bicharraco multiforme del título se aparece transmutado en Drácula y en el monstruo de Frankenstein en un par de escenas). Algo tan indefinible que sólo podía ser descrito como “ello”.

El bombazo mediático de "It" se vio reforzado, pocos años más tarde (1990), con su adaptación a una miniserie televisiva protagonizada por el excelente Tim Curry, cuya cara pintada de blanco y rojo fijó al espantoso clown Pennywise en las pesadillas de toda una generación. Sin embargo, en el fondo, aquella no dejaba de ser una versión audiovisual de estar por casa, que envejeció rápido y mal. Divertida para ver en Halloween y poco más. Por tanto, aún quedaba margen para readaptar el librazo de King en pantalla grande y a todo lujo, actualizando su millar largo de páginas concienzudamente y desde cero. Tras ocho años de trabajo que han implicado inacabables reescrituras de guión (hasta el punto de que resulta difícil saber a quién hay que acreditar por él), algún que otro cambio de director y varias crisis que casi hacen embarrancar el proyecto, la versión 2017 de It es ya una realidad; y es una realidad... extraña.

 

IT (terror)

"Me ve Rob Zombie y me ficha"

 

Para empezar es la primera parte de un díptico, cuya continuación nos llegará el año que viene. Este formato, que garantiza metraje de sobra para desarrollar todas las tramas y personajes, podría hacer pensar que estamos ante un calco narrativo del libro, pero no. Al igual que ocurría en la miniserie, la película separa por completo los dos marcos temporales que se entremezclaban en el relato original: en esta primera entrega los niños protagonistas deberán vencer sus terrores (tanto los más cotidianos como los más intangibles), corporeizados en un monstruoso payaso asesino que aparece cíclicamente para causar estragos en el pequeño pueblo de Derry. La segunda parte (“It, capítulo 2”, o como la llamen) nos devolverá a los mismos personajes enfrentándose otra vez a la misma bestia y en el mismo lugar, pero 27 años más tarde.

Aparte de eso, se han modificado puntos importantes del libro, que en papel funcionaban bien pero que en cine igual hubiesen perdido impacto. Entre ellos el climax, que es a la vez uno de los fragmentos más potentes de la cinta y el que más nerviosos pondrá a los fans irredentos de la novela, por convertir en literal y obvio lo que era metafórico y misterioso (la famosa frase “Todos flotan”). Así mismo, al igual que ya hiciera la miniserie, se ha eliminado por completo cierta escena bastante controvertida, pero que resultaba clave para entender la dinámica emocional entre los protagonistas (según el propio King, más unos “hermanos de armas” juramentados para cumplir una misión suicida, que un mero grupo de amigos del cole). Es comprensible que un pasaje que implica sexo entre menores no sea mostrado en pantalla en toda su crudeza, pero quizás había soluciones más interesantes que simplemente cargárselo.

"La versión 2017 de It es ya una realidad; y es una realidad... extraña"

No obstante, el problema principal de It no está en sus pequeñas traiciones a lo escrito por Stephen King, sino en la naturaleza misma de lo que se cuenta. Porque aquello que en los 80/90 podía considerarse terror fundacional, en 2017 se ha convertido ya en un subgénero mainstream al borde de la sobreexposición. ¿Cuántas variantes hemos visto de la sinopsis “grupo de chavales de pueblo se enfrentan a lo sobrenatural”? La reubicación ochentera (en el libro la cosa sucede a finales de los 50) tampoco ayuda a darle frescura al asunto, sino todo lo contrario: estamos a un paso de que todos los dormitorios infantiles con posters de Dungeons & Dragons y todos los travellings de la pandilla de turno en bicicleta nos parezcan iguales. Ojo, todo ello funciona bien en It, pero es inevitable notar en el paladar un ligero regusto a plato recalentado; y puestos a rememorar por enésima vez la década de los calentadores, las hombreras y el walkman, uno no puede dejar de pensar que productos como It Follows o Stranger Things tienen más carisma y capacidad de sorpresa.

Sea como sea, habíamos quedado en que It era una película extraña, ¿no? Pues en efecto. Pese a todas sus irregularidades, discutibles licencias dramáticas, falta de riesgo en momentos puntuales, abuso de efectismos manidos (golpe de sonido estridente y SUSTAZO), y un metraje quizás algo excesivo para contar sólo la mitad de la historia, It es, en conjunto, una sólida pieza de terror de gran formato. La dirección de Andy Muschietti resulta elegante y firme, tomando prestados algunos “recursos spielbergianos”, como por ejemplo plantar la cámara a la altura de los niños para reforzar la sensación de que viven alienados en un mundo de adultos indiferentes y crueles. La puesta en escena y el uso de los efectos especiales son también notables. Todo tiene un acertado aire a cuento del tío Creepy, a tren de la bruja y a telarañas falsas; en definitiva, a terror visto a través de ojos preadolescentes.

 

IT (terror)

"Aquí pone que ni en Los Goonies ni en E.T. salieron jamás payasos psicópatas"

 

No resulta fácil sostener el armazón de un filme así con un casting compuesto casi exclusivamente por críos, pero It lo logra con creces. En parte porque los siete niños protagonistas son actores de una madurez pasmosa para su edad, pero también porque el guión sabe darles espacio para desarrollar personalidades reconocibles y una convincente aura de camaradería. En cuanto a la teórica atracción principal de la función, el payaso cabrón, la película depende menos de él de lo que cabía esperar, y eso es bueno. Su presencia se siente por todas partes, claro, pero sus apariciones explícitas son espaciadas y por ello más impactantes. La interpretación de Bill Skarsgard, lejos de intentar competir con el tono de psicópata pederasta que imprimió Tim Curry en su día, nos muestra a un Pennywise más alienígena, bestial y desconcertante. O sea, más It.

Como obra sobre la naturaleza de los miedos infantiles, y sobre cómo esos mismos miedos mutan en frustración y estupor cuando uno crece (a menos que los enfrente), It consigue explicar bastantes cosas con los elementos justos, sin aturdir al espectador y, lo más importante de todo, asustándole. Sus mejores momentos funcionan a la vez a varios niveles: como metáforas del abuso escolar o sexual, como proyecciones de traumas psicológicos y como horror sobrenatural puro. Es una manera notable de ser fiel al texto de King sin serlo. Es poner todas las energías en transmitir lo que el escritor quería explicar, en lugar de limitarse a ilustrar de forma literal sus palabras. It, lo repetiré una vez más, es una película extraña; y lo extraño, aunque imperfecto, tiene un atractivo inquietante que nos impide apartar la vista. Como la cara de un payaso.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Copas de yate

INF VNV 4

Recomendada por Kuato a: quien guarde buen recuerdo de la versión televisiva, pero no la haya vuelto a ver desde hace tiempo. No era tan buena. Esta es mejor.

No recomendada por Kuato a: quien esté de acuerdo con la frase popular “El revival de los 80 está durando más que los 80”.

Ego-Tour de luxe por: algunas secuencias, como la del lavabo ensangrentado (que hubiera encajado sin problemas en cualquier entrega de Pesadilla en Elm Street), son cine de culto en potencia.

Atmósfera turbinea por: la idea de separar una historia tan prolija en dos largometrajes es acertada, pero estrenarlos con tanto tiempo de diferencia el uno del otro le resta intensidad como experiencia global.

IT. "It" (2016). Director: Andrés Muschietti. Guión: Cary Fukunaga, Chase Palmer, David Kajganich, Gary Dauberman. Reparto: Bill Skarsgard, Jaeden Lieberher, Finn Wolfhard, Jack Dylan Grazer, Wyatt Oleff, Chosen Jacobs y Jeremy Ray Taylor. Estreno en Venusville: 08/09/2017.

 

Facebooktwittermail

No hay comentarios

Agregar comentario