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LA MOMIA crítica: Momia soltera busca macizorro blanco

Primera entrega del Dark Universe de Universal con Tom Cruise salvando al mundo de la momia

ROBERT THORNHILL

Los viejunos directivos de la Universal los deben tener muy hinchados al ver que los de la Marvel (o sea Disney, los mandamases del cine de entretenimiento) lo petan con cualquier personaje de cómic con algún inverosímil superpoder creando trilogías como churros y mezclándolos sin ton ni son para luchar contra "quiensabequién", porque saben que los sumisos y fieles espectadores se lo van a tragar todo mientras haya personajes "guapeteschulodecojones" y villanos con cierta enjundia e ideas megalómanas de destrucción.

Fruto de este calentamiento testosterónico acompañado de un enfriamiento de la caja fuerte han decidido desempolvar su baúl de viejas glorias del terror para crear su propia Liga de la Justicia o su propio equipo de Vengadores, a lo que han llamado Dark Universe, que no deja de ser un intento de mimetizar lo que hace la competencia sustituyendo a Iron Man  por la momia, a Hulk por Frankestein, y al Capitán América por Van Helsing.

 

La momia: terror

"Es que tras ver Noche en el museo pensaba que todas las momias eran buenas"

 

La momia es la primera piedra de este ambicioso proyecto con el atractivo añadido de ver convertido al Dios del cine palomitero Tom Cruise en una especie de superhéroe sin superpoderes, y el resultado no podría ser más decepcionante. Todas las virtudes que tuvo aquel remake con aires de Indiana Jones que interpretara Brendan Fraser en 1999 (secundarios que aportaban mucho, una historia con los clichés clásicos del mito y mucho sentido Spielbergiano de la aventura) brillan por su ausencia en este reremake del 2017 que no sabe qué quiere ser de mayor.

Y aunque me duela en el alma decirlo, uno de los hándicaps de La momia es la inmensa presencia de Tom Cruise, un actor que, en sí mismo, es una franquicia con sus marcas de fábrica: ese imberbe pechito que siempre le gusta enseñar para regocijo de sus espectadoras calientes, esos sprints que se mete huyendo de explosiones tantas y tantas veces visto, esa carita de niño travieso perfectamente afeitada... No hay nada que diferencie al Tom Cruise de La momia, al de Misión Imposible, Jack Reacher, Oblivion o Al filo del mañana. Mismos gestos, misma caracterización, y vale que nos gusta su rollo, pero cuando ves una escena que te recuerda a tal o cuál película, ahí es donde pierde valor lo que estás viendo.

"Esta primera intentona de Dark Universe con La momia es un fracaso se mire por donde se mire"

Pero bueno, aún teniendo en cuenta que La momia no deja de ser la “nueva” de Tom Cruise, donde más falla es en todo lo demás. Ese giro argumental convirtiendo a la momia en una princesa despechada con ganas de greña no acaba de funcionar, y su ejército de momias serviles  son más bien zombies esqueléticos enclenques que se deshacen como azucarillos. Aunque Annabelle Wallis tiene su morbo, y aunque tristemente estemos acostumbrados a que ninguna actriz ose oscurecer la magnánima presencia del mítico Vincent de Collateral, este amago de princesa que ha traspasado el lado oscuro para abrazar al Dios Seth del mal, más bien la hace parecer una drogata pandillera o alguna X-Women con dos ojos (incluso se pasa un cuarto de la película encadenada), que una temible momia con ganas de llevarte a la ultratumba.

Y ya es un mal endémico de las pelis de Tom Cruise su nula química con su alter ego femenina: ninguna escena de pasión, ni un beso ardiente que echarse a la cara, pero, si a eso añadimos un abusivo uso de los inútiles flashbacks, hacen que esa presumible relación diabólica entre la perversa momia con ganas de empotrar a su elegido Tom Cruise, quede en agua de borrajas sin que salte ni una mínima chispa, ni sexual ni de terror.

 

La momia: cine de terror

"Ya te dije que si no te dejabas el flequillo de Brendan Fraser no funcionaría"

 

Lo peor del asunto  es que tal como comentábamos, La momia es el germen de un ambicioso proyecto de criaturas clásicas del terror 2.0 de la Universal que ya tiene a Javier Bardem y a Johnny Deep en la recámara para hacer de Frankestein y El hombre invisible respectivamente, teniendo como eje de unión una oscura organización denominada Prodigium (copia descarada de S.H.I.E.L.D.) dirigida por un histriónico Russell Crowe haciendo las veces del Dr Jekyll.

En el supuesto de que después del despropósito que ha supuesto La momia, Universal decida continuar con esta arriesgada aventura, esperemos que hagan una redefinición de lo que quieren hacer porque después de ver La momia, a uno no le queda claro si los de Prodigium quieren rescatar a esos ancestrales engendros o bien crear un ejército de viejas glorias del mal. Igualmente, esta primera intentona es un fracaso se mire por donde se mire, y mientras Tom Cruise no se rebaje a dejarse barba de tres días y a disfrazarse de Indiana Jones, preferiremos verlo en el esperado remake Top Gun :Maverick o en Misión imposible 6, que en la siguiente entrega del Dark Universe o en una hipotética La momia 2.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Congelada en carbonita

INF VNV 2

Recomendada por Kuato a: los incondicionales de Cruise que babean haciendo el ridículo en "El Hormiguero" y han visto Minority Report 50 veces

No recomendada por Kuato a: aquellos nostálgicos de la Hammer, con ese aire místico de la Momia y sus coetáneos.

Ego-Tour de luxe por: ese Tom Cruise obsesionado en que todo el mundo lo vea en bolas aunque no enseñe lo más importante. Olé tus huevos… aunque nunca los muestres.

Atmósfera turbínea por: esta manía de rescatar a nuestros monstruos de sobremesa. Que se dejen de remakes absurdos y le den al tarro para crear nuevos personajes.

 

LA MOMIA. “The Mummy” (2017). Director: Alex Kurtzman. Reparto: Tom Cruise, Sofia Boutella, Russell Crowe, Annabelle Wallis y Javier Botet.

 

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