LA PIEL FRÍA entrevista a Xavier Gens: La piel sitgera

"No he terminado con la violencia, pero tenía necesidad de hacer una peli como La piel fría"

■ RAY ZETA

FESTIVAL DE SITGES, 11/10/2017. Estoy sentadito en una mesa del jardín del hotel Melià esperando a Xavier Gens, cuando de repente llega Aura Garrido, se sienta con rapidez y me dice: "Venga, vamos al lío". A lo que yo le respondo: "Yo voy contigo al lío cuando quieras, pero antes he de entrevistar a Xavier Gens". Aura Garrido se sonroja y, sin mediar palabra, se levanta y se va. Entonces llega Xavier Gens, a quien ya conozco de cuando vino al Festival a presentar Frontera(s) y The Divide en 2007 y 2011 respectivamente, se sienta a la mesa, y en ese francés tan dulzón que le caracteriza, recordamos sus anteriores estancias en Sitges hasta que nos metemos de lleno con La piel fría. Pero antes, exclamo la expresión "gallina de piel", y le explico que se trata de una frase hecha distorsionada popularizada por Johan Cruyff.

-¿Conocías la novela "La piel fría" de Albert Sánchez Piñol antes de aceptar adaptarla como peli?

-Sí, la conocía porque ya la había leído. Leo mucho literatura fantástica y cuando la productora me propuso hacer la película, me puse muy contento porque soy un gran fan del libro y me lo leí de una tirada por segunda vez. A partir de ese momento me dediqué a pensar cómo iba  ser el proceso creativo de adaptación, lo que fue muy interesante.

-¿No sentiste canguelo en ningún momento por la dificultad que implicaba su adaptación?

-No realmente, era un reto emocionante y motivador. No tuve miedo, al contrario, tuve ganas de empezar enseguida, de empezar a pensar las cosas, de dar mi visión del océano, de la isla y de las criaturas. Dije que quería apartarme de los océanos con delfines, creí que la productora Denise O'Dell me iba a decir que estaba loco, pero me dijo que adelante. Y eso es lo que hecho en la película, una historia épica a lo El silencio de los corderos, con criaturas que atacan el faro y con el mar que insufla vida, para lo que me he inspirado en las películas de Peter Jackson y Guillermo Del Toro, de los que soy gran fan.

-¿Y cómo es que te ha dado por dirigir una película tan diferente a las anteriores? Al lado de Frontera(s) o The Divide, La piel fría parece Heidi...

-(Risas) Bueno, quien conoce mi trabajo y mis cortometrajes sabe que La piel fría representa mi trabajo de autor, a diferencia de Frontera(s) y Hitman, que eran películas comerciales, La piel fría es un trabajo de autor y por eso espero que el público descubra lo que he querido expresar en él, pues como director me he expresado más en La piel fría que en Frontera(s).

-Háblame de la criatura, que no es más ni menos que un mutante anfibio humanoide. ¿Cómo la diseñasteis?

-Hablamos con científicos porque quería que la película se inspirara en la Teoría de la evolución de Darwin, así que les pregunté si podía haber existido otra evolución a la que hubo realmente. Me dijeron que de hecho podríamos haber evolucionado a partir de cualquier animal, como la ballena y el delfín, por eso los ojos de Aneris son de ballena, la piel, el corazón y la respiración de delfín, y no tiene pulmones sino branquias, con dos pequeñas válvulas para expulsar el aire y equilibrar la presión acuática. Eso es lo que estudiamos con los científicos para obtener un diseño lo más realista posible. El diseño final está más próximo a un animal porque es un animal que ha evolucionado de forma diferente y es anfibio. Sin olvidar claro que nos movemos en el terreno de la fantasía como en La forma del agua, pero de la forma más real posible.

-Recuerda por eso otras criaturas del cine, desde criaturas chungas como el Gollum o los zombies de Soy leyenda, a más coleguis como Mística de los X-Men, Abe Sapien de Hellboy o Jaylah de Star Trek...

-La única referencia ha sido la película de dibujos El planeta salvaje, de 1973, que tiene criaturas similares. Espera, que te las enseño (saca su móvil, busca en la galería de fotos, me enseña fotogramas de la película citada, y oye tú, pues sí, las criaturas que salen son clavadas a las de La piel fría). Es la única referencia que hemos tenido aunque luego pueda recordar a otras criaturas como Mística, Abe Sapien u otros personajes.

-¿Y cómo ha sido la técnica de creación? ¿CGI o maquillaje?

-Maquillaje a la antigua usanza con algún retoque de digitalización. Primero implantamos las prótesis y luego retocamos pómulos, labios y ojos. Una sesión de maquillaje completo duraba ocho horas, una vez puesto, si lo aprovechábamos para otra jornada, eran cuatro. Había días que Aura Garrido dormía con el maquillaje puesto. La citábamos a las 2 o 3 de la madrugada para maquillarla y cuando habíamos acabado se dormía un rato.

-En cuanto a la relación de los personajes, en la novela el prota tiene sexo mutante con la criatura, en cambio en la película has obviado ese aspecto...

-No lo he mostrado, pero sugiero que lo tienen. El público entiende que lo tienen sin necesidad de mostrarlo gráficamente, ya que no siempre hace falta mostrarlo. Te voy a poner un ejemplo. IT, la última adaptación de Stephen King, en el libro Beverly hace el amor con el grupo del Club de los Perdedores y eso no sale en la película. En La piel fría he querido mostrar el contraste entre los dos hombres que habitan la isla. Ray Stevenson tiene sexo con la criatura porque responde a instintos más primitivos, en cambio David Oakes responde a una línea más romántica. Si hubiera mostrado el sexo con David Oakes hubiera puesto a los dos personajes en el mismo saco.

-La piel fría es una peli romántica, Budapest, tu último trabajo, es una comedia... ¿Qué ha pasado? ¿Dónde está el Xavier Gens violento, crudo y morboso de Frontera(s) y The Divide?

-(Risas) Lo que ocurre es que me he hecho más viejo, ahora tengo 41 años  y un niño pequeño de 3 (risas). No he terminado con la violencia, pero tenía necesidad de hacer películas diferentes. Que haga una película que tenga violencia o no, depende de que tenga una buena historia. Frontera(s) y The Divide tenían unas historias muy duras, y La piel fría también tiene una historia dura, pero la cuento de manera diferente. Así que si encuentro una película violenta con una buena historia la haré. Frontera(s) y The Divide tenían una violencia muy gráfica, me apetece volver a ello, pero con la fuerza temática de La piel fría. Estad pues tranquilos, prometo que haré una película tan violenta como las otras, pero con fondo.

Xavier Gens y la piel fría venusvillera