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LOS SIETE MAGNÍFICOS crítica: Con siete basta

Remake de Los siete magníficos con menos actores magníficos de lo que nos hubiera gustado

RAY ZETA

Que ya no hay título intocable en Hollywood por mítico que sea ya lo sabemos. Ridley Scott versionó Los diez mandamientos en la mejorada Exodus: Dioses y reyes, este verano hemos tenido la descafeinada nueva Ben-Hur, y ahora nos llega el divertido remake de Los siete magníficos. Títulos que siempre saldrán perdiendo en las comparaciones, pues no sólo deben enfrentarse a la calidad de las obras originales, sino también a su recuerdo nostálgico, y ahí sí que tienen menos que rascar que el Pitufo Empollón enfrentándose a Hellboy en un combate cuerpo a cuerpo.

Y en Los siete magníficos empezamos por el reparto. Imposible combatir con un elenco de actores de la talla y el carisma de Yul Brynner, Steve McQueen, James Coburn y Charles Bronson, de ahí que esta nueva versión salga perdiendo ya en el primer round. Si todo el nuevo reparto hubiera estado formado por primeras espadas hubiera tenido alguna posibilidad, pero sólo tres estrellas de siete posibles (Denzel Washington, Chris Pratt y Ethan Hawke) es un pobre balance de inicio por muy bien que estén estos tres y secundarios como Vincent D’Onofrio o Byung-hun Lee.

 

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"¿Seguro que esto es un remake de Los siete magníficos y no de Grupo salvaje?"

 

Por el resto, la misma historia que ya nos contó Akira Kurosawa en Los siete samuráis, con alguna ligera diferencia respecto a la versión de John Sturges de 1960. Esta vez el villano extorsionador no es un bandido mexicano como Eli Wallach sino un cacique cabrón interpretado por un sobreactuado Peter Sarsgaard al que sólo le falta llevar una etiqueta en la frente con la palabra “villano”. Y de acuerdo con los tiempos políticamente correctos que corren, el equipo incluye un negro (Denzel Washington, por si no se habían dado cuenta), un mexicano, un indio y un oriental, como si fuera la Legión Extranjera.

Tampoco los nuevos pistoleros son una réplica de los originales, aunque está claro que Denzel Washington y Chris Pratt hacen de Yul Brynner y Steve McQueen (y con muy buena química, por cierto, xapó por los dos), y el resto conserve algún vestigio reconocible, como el rasgo característico de Robert Vaughn heredado por Ethan Hawke, o los cuchillos de James Coburn lanzados aquí por Byung-hun Lee. Tampoco las presentaciones de cada uno de ellos se repiten de la misma manera, aunque sí se repita la fórmula magistral de presentarlos uno a uno en su ambiente.

“Esta nueva versión de Los siete magníficos es un western brioso, entretenido y de impecable factura, que tiene todo lo que un buen western debe tener”

Así y todo esta nueva versión es un western más que digno, brioso, entretenido y de impecable factura, que tiene todo lo que un buen western debe tener: lugares reconocibles como el típico pueblo del far west con su herrero, su enterrador, su barbería, su puticlub y su saloon; tipos duros que comen alambre y mean aguarrás; tiroteos en pequeño formato, tiroteos a lo grande, y duelos que rinden homenaje a los primeros planos entrecejados popularizados por Sergio Leone en su trilogía del poncho, y hasta se permite alguno a lo Grupo salvaje.

Y he aquí el único punto en el que Los siete magníficos versión 2016 vence a la original: en la espectacularidad de su tiroteo final. Porque el tiroteo final de la versión de 1960 está bien, pero con los medios existentes actuales, y el gusto por la acción exagerada del público de hoy en día, el tiroteo final de los nuevos siete magníficos dura el doble y se dispara más plomo (y puñales y flechas) que en las tres pelis de Los mercenarios juntas. Y con un ritmo, con una planificación, y un montaje, que consolidan a Antoine Fuqua como uno de los grandes maestros de la acción actual.

 

Los siete magníficos: western

"Te equivocas de peli, la del indio bueno es El Llanero Solitario"

 

Y lo mismo va para su violencia. En este remake hay más muertos que en el tsunami de Lo imposible, y son muertos mostrados en toda su crudeza sin importar si son bandidos, granjeros, protagonistas o secundarios. Asesinados a bocajarro unos, acribillados a distancia otros, ensartados a flechazos, o rajados a cuchillo, lo que le da a la peli un saborcillo especial de lo más sabroso, que si ya en el 2016 se agradece por no estar acostumbrados a verlo en pelis presuntamente familiares, imaginen si sucede en el 60: hubiera provocado la huída del público despavorido en desbandada.

Por eso este Los siete magníficos es un western recomendable cuyo mayor defecto radica en eso, en ser Los siete magníficos y tener que competir con el original, aunque haya evitado enfrentarse en los puntos más fuertes. Los siete magníficos de 1960 es un western clásico cuyas mayores bazas fueron el carisma de su reparto, su fotografía natural, la evocadora partitura de Elmert Bernstein, y su épica global. Los siete magníficos de 2016 es tan sólo un divertido tebeo del oeste americano con pistoleros que disparan, indios que lanzan flechas y orientales que arrojan cuchillos, lo que tampoco es poco.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Copas de yate

INF VNV 4

Recomendada por Kuato a: amantes del western que les dé igual ver a Yul Brynner que a Denzel Washington con tal de que se salgan a caballo pegando tiros.

No recomendada por Kuato a: puristas que se echen las manos a la cabeza y tiemblen entre fríos sudores cada vez que oigan la palabra "remake".

Ego-Tour de luxe por: el chiste que cuenta Chris Pratt, homenaje explícito a Los siete magníficos original y al personaje de Steve McQueen en particular.

Atmósfera turbínea por: los directores de casting, que no han confeccionado un equipo total de titulares sino uno con la mitad de suplentes.

 

LOS SIETE MAGNÍFICOS. Estreno en Venusville: 23/09/2016

 

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