MECHANIC: RESURRECTION crítica: Que parezca un accidente

Jason Statham vuelve a ser el asesino profesional de mono azul en Mechanic: Resurection

■ ROBERT THORNHILL

A estas alturas, la condición de actor franquicia que ha alcanzado Jason Statham nadie lo pone en duda, y como ya hemos comentado alguna vez en Diario de Venusville, se ha convertido en el genuino sucesor de aquellos mamporreadores profesionales como Chuck Norris, Steven Seagal o Jean-Claude Van Damme que tantas tardes de gloria testosterónica nos dieron durante los gloriosos 80’s. De esta manera Mechanic: Resurrection no deja de ser una muesca más en la culata de ese héroe cuadrado y ceñudo, de mínima gesticulación y amante de las frases lapidarias en que se ha convertido Jason Statham, el sucesor natural del trono del más leñero de Hollywood y que película tras película acrecenta esa leyenda.

Tras ese paso en falso que supuso su aparición en la comedia Espías de facilón y dudoso humor, vuelve por todo lo alto en esta continuación de The Mechanic, la cual a su vez era un remake libre de aquella moneykillermovie que protagonizó otro legendario duro, bigotudo y malcarado Charles Bronson con el intrincado nombre de Friamente…sin motivos personales (The Mechanic). Ambas se centran en el frío y meticuloso asesino a sueldo Arthur Bishop, que igual que ocurría en Wanted, cumple encargos de mentes brillantes en la sombra que deciden a quién se debe eliminar para preservar la paz y el equilibrio del mundo. Siendo realistas, gracias al oficio del eficaz Simon West y de uno de esos secundarios de lujo como Ben Foster, The Mechanic fue una adaptación mejorada de la espesa versión de 1972 y consigue encontrar el difícil equilibrio de crear una historia con cierta chicha argumental y, a la vez, explotar el filón varonil del duro entre los duros Statham.

"¡Envidia! Mi Espías no tiene nada que envidiarle al Mentiras arriesgadas de Arnie"

Pero eso ya es historia del pasado, porque Mechanic: Resurrection se desmarca del intento creativo de crear una buddy-movie a lo Training Day como la primera, para ponerse servilmente a los pies del nuevo rey del puño-fácil y poner los cimientos para la creación de una nueva franquicia centrada en el creativo sicario Arthur Bishop, haciendo un cruce con el imaginativo y manitas McGyver, el atlético Ethan Hunt y el fornido Jason Bourne. La perfección en potencia, vamos. Consecuentemente, el guion se puede resumir en la sucesión sin continuidad de situaciones donde se producen explosiones, muchos tiros, se dan piños, y disfrutamos de las fantasmadas de un Arthur Bishop con alma de personaje de videojuego con licencia para matar, que utiliza todas las técnicas habidas y por haber para liquidarse a sus víctimas propiciatorias (y es que se lo ponen a huevo).

“Mechanic: Resurrection se pone servilmente a los pies del nuevo rey del puño-fácil y pone los cimientos para la creación de una nueva franquicia centrada en el creativo sicario Arthur Bishop”

Después de haber dado carpetazo a la saga Transporter, este Mechanic: Resurrection tiene toda la pinta de ser el germen de una nueva franquicia y convertirse en la Misión Imposible de Tom Cruise o el Bourne de Matt Damon, en un papel como el de Arthur Bishop que permitirá a Statham dar rienda suelta a todo esa gama de facultades que le hacen ser el action-hero de referencia en estos momentos: esas miradas asesinas acompañadas de sentencias intimidatorias, su capacidad atlética que demuestra con saltos acrobáticos recordando su época de saltador olímpico, y esa destreza made in El Equipo-A para montar tinglados ruidosos y explosivos.

"La dejamos salir poco no se le ocurra hacer Los Cuatro Fantásticos 3"

Dentro de los aspectos que deberían mejorar las entregas posteriores encontramos buscar una  chica florero Bond menos desaborida que una pobre Jessica Alba en horas bajas, cuyo otrora suculento cuerpo ha perdido valor en el mercado y ya no resulta tan atractiva para ese espectador que espera el típico bellezón que te quita el hipo de las pelis de espías. Con decir que en el duelo de exhibición de pectorales y desfile en paños menores por la playa, gana por goleada un Jason Statham en plena forma y marcando abdominales está todo dicho. Este macizorro se merece algo más que una cara bonita que cuenta sus pelis por fracasos.

De inclasificable se puede catalogar también el papel de Tommy Lee Jones, recordando sus tiempos haciendo de Dos Caras en Batman Forever, que parece salido de una peli de Austin Powers con un estilo retro setentero y gafas enormes estilo John Lennon, que da ese toque de humor (involuntario o no) extravagante necesario ante la nula capacidad sarcástica demostrada por un Bishop al que le faltan tablas jamesbondianas para acabar de redondear el personaje.

No estamos ante una película que pasará a la historia, ni que dé para mucha tertulia a la salida del cine, pero si lo que se busca es pasar un buen rato viendo cómo se lo monta el bueno de Jason en un tour por el mundo para ir ventilándose a quien se le ponga por delante para salvar a su nuevo amor, con Mechanic: Resurrection quedarán más que satisfechos: cine de acción palomitero sin más pretensiones.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Copas de yate

Recomendada por Kuato a: los que quieran ver algún día a Jason Statham como nuevo James Bond. Este personaje es lo más parecido que podemos encontrar.

No recomendada por Kuato a: los que se indignaron por la prisión nazi de Evasión o Victoria. Es de risa la cárcel de alta seguridad de Malasia que sale en esta película.

Ego-Tour de luxe por: esa especie de réplica de Protócolo Fantasma, con un Jason Statham desafiando las alturas en una escena adrenalítica muy lograda.

Atmósfera turbínea por: ese intento de “baile” de Jason Statham con Jessica Alba. Jason: espero que folles bien porque bailando no tienes futuro.

■ MECHANIC: RESURRECTION. Estreno en Venusville: 07/10/2016