TRANSGRESSION entrevista a Michael Ironside: Duro de pelar

Y de roer... Una entrevista con Michael Ironside tan tenso como si tuviera un erizo metido en el culo

■ RAY ZETA

FESTIVAL DE SITGES, 11/10/2011. Que Michael Ironside se haya pasado toda la vida interpretando personajes que en su mayoría son villanos o tipos duros de pelar no es casualidad. En cuanto lo tienes delante (y le entrevistas) entiendes que no puede ser de otra manera. Incluso estando más avejentado y más gordo, mucho más gordo, de lo que estamos habituados a verlo, basta con solo una mirada para entender por qué directores como David Cronenberg, Tony Scott, Paul Verhoeven o Wolfgang Petersen, confiaron en él para otorgarle pequeños grandes papeles en producciones como Scanners, Top Gun, Desafío total, Starship Troopers o La tormenta perfecta, entre más de 200 trabajos que incluyen también títulos como la serie V, Terminator Salvation o X-Men: Primera generación.

Un tipo tan duro de pelar dentro de la pantalla como fuera, como verán a continuación (y un hueso duro de roer también, como también verán). “No lo entretengáis mucho que está muy cansado”, nos ha prevenido la secretaria de prensa… Y después de estrechar manos de la forma más correcta nos hemos sentado con él Àlex Giler, co-ciudadano de Venusville pillado al vuelo para la ocasión esa misma mañana, y servidor, en una mesa del interior del hotel Melià.

Dado que él interpretó a Richter en Desafío total, y que por tanto ha estado en Venusville (todos en pie en señal de respeto, que pocas personas vivas además de los redactores de esta santa web pueden decir lo mismo), hemos empezado enseñándole un flyer del Diario de Venusville para que viera que el nombre de la web es en homenaje a Desafío total, pero por el efecto que le ha causado, como si se hubiera llamado “Diario de Marisol” en homenaje a Un rayo de luz. Al tío se la ha traído al pairo el nombre, la web, y hasta nosotros mismos.

 

 

“Diez minutos nada más”, nos ha espetado la secretaria de prensa… Ay, que hay días en los que uno no debería levantarse de la cama para entrevistar a nadie, y hay días también en los que uno tampoco debería levantarse de la cama para que le entrevistara nadie… Le he pedido amablemente que intente ser breve en sus respuestas para aprovechar el tiempo al máximo, y zas, le ha cambiado la cara de golpe.

-¿Tú vas a ser breve en tus preguntas? -me ha preguntado.

-Bueno sí, lo intentaré –he respondido yo sorprendido…

-Pues entonces empieza –me ha ordenado en tono serio.

Y con este buen rollito tan propio de compañeros de Venusville que se quieren como hermanos que han respirado el mismo irrespirable aire, hemos empezado.

-Habiéndote visto tantos años como hombre duro, sorprende que en Transgression interpretes al marido y no a uno de los ladrones secuestradores…

-Es cierto, interpreto al marido. (Pausa) No estás formulando una pregunta, estás diciendo algo que ya sé.

-Está bien... ¿Elegir el papel de marido fue decisión tuya?

-Sí, me habían ofrecido otros tres papeles al mismo tiempo que esta película, cuatro en total. Dos de ellos no eran muy buenos, de los otros dos, uno era en Detroit y uno aquí en Barcelona. Mi esposa leyó los guiones, me preguntó quién estaba en ellos, le dije que Maria Cucinotta estaba en uno, y me dijo: “haz éste”. Le pregunté por qué y me respondió que porque como Cucinotta es una dama clásica, el proyecto tenía puntos para ser también un proyecto clásico.

-En la película salen referencias al Barça constantemente. ¿Te gusta el fútbol?

-No, es mi mujer en la ficción a quien le gusta. A mí no.

-Háblame ahora de los ladrones de la película. Se supone que son profesionales, pero cuando les mentís acerca del dinero se lo creen, y cuando os escondéis en la casa no son capaces de encontraros…

-¿Has visto la película?

-Sí, claro.

-Es que la casa tiene seis plantas. Seis plantas, ascensor un garaje enorme… ¿Me estás preguntando si creo que la historia funciona? Eso es una pregunta tonta para preguntarme. ¿Por qué me preguntas eso? Tú lo que quieres es que diga que la historia no funciona...

 

 

Elegí esta película porque su mensaje es que no importa cuánto dinero o propiedades tienes, eso no te hace más seguro o mejor. Todas las empresas del mundo quieren más y la gente también quiere más, y eso no te da mayor seguridad, al contrario, se pierde seguridad con ello. Los ladrones entran porque también quieren más de lo que tienen, así que el mensaje de la película es que más es menos. Normalmente es al revés, menos es más, por eso elegí la película, porque creo en el mensaje.

Llegados a este punto, vista la buena predisposición de Michael Ironside para responder a mis preguntas, le cedo la palabra a mi compañero Àlex Giler para evitar males mayores, como que me desintegre de un bombazo como si fuera un bicharraco extraterrestre de Starship Troopers, por ejemplo.

-¿Te molesta que el público te vea como el estereotipo de actor duro?

-Bueno, yo no soy un tipo duro. No disfruto interpretándolos, disfruto trabajando, pero yo no soy duro, hasta juego al golf. No tengo posibilidad de elegir… Bueno, puedo elegir entre lo que se me ofrece, pero no me ofrecen el papel de primer bailarín de un cuerpo de ballet, ni tampoco el papel de galán romántico…

-Acerca de Scanners…

-(Interrumpiendo) De eso hace 30 años…

-¿Fuiste consultado para poner tu imagen en el póster promocional?

-No, David Cronenberg controla todo lo que hace. La primera vez que supe algo de ese póster fue cuando alguien me envió una foto de él desde Picadilly Circus en Londres. Entonces yo trabajaba de camarero en un bar de Toronto porque no tenía dinero para pagar el alquiler. Me hubiera sorprendido que David Cronenberg me preguntara, funcionó muy bien, fue una campaña promocional maravillosa.

-Stephen Lack, el otro actor, no ha tenido tanta suerte en su carrera…

-Es que Stephen Lack no es actor, es pintor, y muy bueno, por cierto. Yo me preparé durante cinco años antes de conseguir mi primer trabajo, 24 horas de clase por semana… Quizás no lo parezca, pero soy un actor muy preparado.  Stephen era un pintor que formaba parte de un movimiento de cine underground de Montreal, pero no era un actor formal. Pese a que hizo algún trabajo underground eligió volver a pintar, lo que creo que fue una buena elección.

-¿Qué hay de cierto sobre que David Cronenberg estuvo a punto de dirigir Desafío total en vez de Paul Verhoeven?

-No sé ni una palabra de eso. Me encontré con Paul Verhoeven para Robocop, pero como estaba rodando Traición sin límites no puede dejarla para hacer Robocop, que hubiera sido una buena alternativa, y nos encontramos de nuevo para Desafío total, pero desconozco si David Cronenberg estaba implicado en el proyecto. Hasta lo que yo sé, Carolco estuvo cuatro años intentando hacer la película, así que puede ser posible.

"Eso es una pregunta tonta para preguntarme. ¿Por qué me preguntas eso? Tú lo que quieres es que diga que la historia no funciona..."

(¿He oído Desafío total? Esta es la mía para volver a entrar, así que como si fuéramos una pareja de pressing catch como los Rockeros o los Sacamantecas, Àlex choca mi mano y me pasa el relevo para que vuelva a meterme en la entrevista como quien vuelve a entrar en el ring).

-¿Qué tal fue rodar la pelea final en el elevador con Arnold Schwarzenegger?

-Tenía dos costillas rotas porque no utilizábamos doble. Hay una escena en la película en la que Arnold y Rachel Ticotin saltan, yo vengo corriendo con un arma y dicen que no hay que disparar porque va hacer volar la bóveda, y cuando yo me giro Arnold me golpea en el pecho con su arma. Allí me rompió el esternón y dos costillas. Dos semanas más tarde rodamos la escena del elevador sin usar dobles.

Bueno, tenía un doble, Sam McCrane, que hizo Titanic y ahora está haciendo las películas de James Bond... Sam era mi doble, él hizo el salto a través de la ventana en Venusville e hizo una de las tomas en las que estoy colgado del elevador, pero toda la pelea la rodé yo.

-¿Y cómo están tus brazos ahora? Veo que te han crecido…

-Sí, vuelvo a tenerlos, a veces pierdo partes del cuerpo en las películas… Arnold es un absoluto profesional y Big Armstrong, que es uno de los mejores si no el mejor del mundo, coordinó las escenas de lucha de la película. Ha hecho casi todas las películas de James Bond, muchas de Steven Spielberg… Teníamos un gran equipo.

-¿Y qué hay de Los inmortales II? ¿Cómo se siente uno al interpretar a un inmortal proveniente de otro planeta?

-¿Por qué lo preguntas?

(Cagada. Le estoy preguntando por la caracterización más ridícula de toda su carrera y él lo sabe, una caracterización con una peluca y un vestuario dignos de un integrante de la carroza real del Día del Orgullo Gay en Chueca, así que vuelve a enseñarme los dientes y a ponerse a la defensiva).

-Porque es la única película en la que te recuerdo con un vestuario y un maquillaje de ese estilo…

-En todas las películas hay vestuario y maquillaje…

-Sí, pero no como ése…

-Fue muy divertido hacerla, me lo pasé muy bien. Fueron seis meses en Argentina. Te dan una capa, una peluca y una espada, y te pones a trabajar, y fue un buen trabajo.

 

 

(Entendido, no hace falta saber idiomas para entender esas miradas asesinas... Vistas las buenas migas que estamos haciendo, casi mejor opto por volver a cederle la palabra a mi compañero Àlex, que está sobrellevando la situación como el gran profesional que es, y quedo agazapado cual guepardo de caza a la espera de volver a engancharlo en otro momento)

-¿Has trabajado alguna vez con Roger Corman?

-Después de Desafío total hice una película titulada Proyecto: Terror, de la que Roger tenía los derechos y Carolco produjo. Fue un proyecto desarrollado por Corman, propiedad suya, pero producido por Carolco.

-¿Qué pasó con Carolco? En su época facturó películas de gran éxito…

-Lo último que hicieron fue Danko: Calor rojo, buena película… No sé qué pasó exactamente, empezó a perder dinero como empresa. Muchas cosas perdieron dinero en los 80 y a principios de los 90.

-¿Crees que se te podría comparar con algún otro actor secundario? ¿Warren Oates, quizás?

-Uy no, ni me atrevería a pensarlo, Warren Oates es un dotadísimo actor: Quiero la cabeza de Alfredo García, Dillinger… Es un actor maravilloso, ni se me ocurriría compararme con él.

-Bueno, ambos os habéis especializado en villanos o personajes moralmente ambiguos…

-Os diré qué suele pasar: voy conduciendo, la policía me ve, me hace parar y me hace bajar. Entonces dicen “Oh, eres el actor…” (risas), y recuerdan que siempre hago de malo. La policía me para constantemente.

(¡Ay, que nos avisan que se nos acaba el tiempo! Sólo queda un minuto para una petición final. No será capaz de negarse, siendo ambos hermanos de Venusville...)

-Y ya para acabar, tú que has estado en Venusville, ¿podrías dejarle un mensaje a Kuato para todo el Diario de Venusville?

-¿Qué quieres que diga?

-Si podrías dejarle un mensaje.

-¿A Kuato?

-Sí, a Kuato.

-¡Agáchate, que te disparo!

Lo que les decía, como si hubiéramos sido hermanos de Springfield por Los Simpson en vez de Venusville por Desafío total... Duro de pelar tanto dentro como fuera de la pantalla, este Michael Ironside, y difícil de manejar a más no poder como un Johnny Taxi sin frenos.

 

 

Nuestro hermano de Venusville, Michael Ironside

 

■ TRANSGRESSION. Estreno en Venusville: 21/10/2011