Categorías

TRES 60 entrevista a Santiago Segura: Santiago Segura, productor

"Me gusta más Steven Spielberg como ejemplo a seguir que Jerry Bruckheimer"

RAY ZETA

CINE ARIBAU, BARCELONA, 23/07/2013. Ya tenía ganas de hablar de tú a tú con Santiago Segura. Pese a haber coincidido con él en diferentes actos promocionales (la última la de Hotel Transilvania en la pasada edición del Festival de Sitges) nunca había tenido oportunidad. Y eso que siempre le he admirado por su inteligencia, su naturalidad y su socarrón humor. Llega en taxi hasta la puerta del mismo cine donde tienen lugar las entrevistas con el equipo de la productora Bowfinger, y sólo salir pisar la calle ya es increpado por un trío de jovencitas que le piden fotografiarse con él. Cuando llega donde está la prensa, como casualmente soy al primero que ve, me saluda estrechándome la mano. “Dame la fórmula”, le digo yo señalándole con la mirada a las jovencitas que aún siguen allí observando. “¿Qué fórmula?”, me pregunta él, “éstas se fotografían con cualquiera que les parezca famoso aunque no sepan quién es”, me explica esbozando una leve sonrisa, y es acompañado al lugar donde realizará la primera entrevista para una televisión.

Extremadamente delgado, en pantalón corto, y con sus sempiternas barbas y melenas, la primera vez que coincidí con él cuando contaba algunos kilos más fue hace más de diez años en la rueda de prensa de La chica de Río, comedia que presentaba con Hugh Laurie, por eso cuando es mi turno se lo recuerdo, y me confiesa que pese a la buena amistad que hizo con Laurie durante el rodaje y la promoción de la película, desde que estalló el éxito de House que no ha sabido nada más de él. Tal como les decía, naturalidad al cien por cien y una humildad absoluta. Mil preguntas revolotean en mi cabeza acerca de su trabajo, de sus anécdotas y de, cómo no, Torrente, la saga cinematográfica cuyo éxito sin precedentes ha marcado un antes y después en la historia del cine español, pero como sólo dispongo de diez minutos y al fin y al cabo somos profesionales, empiezo por Tres 60, la película que ha venido a presentar, y por sus labores de productor. Tiempo habrá de tomarse unas cañas con él algún día, y charlar en la intimidad de los entresijos que han conformado su carrera sin la presión que comporta toda promoción.

 

 

-Hay gente que se sorprende cuando ve tu nombre como productor…

-Bueno, ya llevo un tiempo produciendo. Creé la productora de Amiguetes para hacer Torrente, y como hago un Torrente cada tres o cuatro años, incluso entre la 3 y la 4 pasaron seis, todos los beneficios obtenidos se diluirían si no pudiera mantener activa la productora, por eso invierto en otros proyectos de cine. Ésta es la séptima película que producimos.

-¿Qué le viste al guión de Tres 60 para decidirte por ella?

-La mayoría de guiones que me llegan los tengo que dejar a la mitad porque no me interesan, y si no me interesa el guión tampoco me va a interesar la película, en cambio este guión no pude parar de leerlo, quería llegar al final y saber que pasaba con la historia. Me sentía totalmente empatizado con los personajes, sentía curiosidad por ellos y por los follones en los que se metían, y el desenlace me pareció totalmente inesperado. Me gustó el desenlace y me pareció totalmente sorpresivo.

-¿Cómo eres como productor? ¿Como un Jerry Bruckheimer que lo controla todo, o como un Steven Spielberg que deja hacer?

-(Risas) Me gusta más Spielberg como ejemplo a seguir. Más supervisar, aconsejar, opinar… sobre el cartel , sobre la música… ese tipo de cosas que hace un productor. Dejar que la gente fluya, intentar que los medios técnicos sean los mejores posibles, que el director cuente con los actores que quiere y con las semanas que necesita, y opinar también en el montaje. La verdad es que ser cinéfilo y poder ser productor es algo bonito, estás opinando sobre una película y te hacen caso, porque no eres un espectador, eres uno de los que hace posible que se haga la película.

-¿Y metes mano a lo que se rueda?

-Intento no meter mano nunca en algo en lo que no esté de acuerdo el director. Intento que haya sobre todo buen rollo porque si no el barco no puede llegar a buen puerto, y el capitán tiene que ser el director. En esta película por ejemplo, había un final que no convencía a nadie y por eso me dije que había que rodar otro. Tienes esa potestad de decidir rodar otro final diferente más impactante. A mí lo que no me gustaría nunca es estar involucrado en una historia, como ha pasado muchas veces en la historia del cine, en la que el director y el productor acaban a puñetazos, y al final el productor despide al director y contrata a otro. Recuerda Lo que el viento se llevó, al final la película es más de David O. Selznick que de los directores. Yo quería que el director reconociese esta película como suya y fuese su película.

 

 

-Ahora que has mencionado el final, se nota que la última escena está añadida. ¿No estaba en el guión, entonces?

-El final estaba, pero más intuido, y yo quería que fuese un poco más explícito. El primero acababa en la escena anterior y se dejaba más abierto porque no sabías qué es lo iba a pasar. La película presenta un dilema moral. No sabemos nunca si somos héroes o villanos. Cada uno en su nivel deberíamos ser tan estrictos con nosotros mismos como con los demás.

-En esta escena nueva además, se le ve el culito a la chica…

-Pues mira, eso que ganamos también (risas).

-Háblame del personaje de Geraldine Chaplin. Un villano muy de tebeo, que habla con la voz rota de Vito Corleone, y ambiguo como el Barón Ashler de Mazinger Z. ¿Cómo lo creasteis?

-Para el villano necesitábamos a alguien muy inquietante y misterioso. La idea de que fuera una mujer en vez de un hombre, y de que fuera ambiguo, que no supieras realmente si es una mujer, si es un hombre, o si es uncastrati, rollo Barón Ashler, aporta. No me acuerdo ahora mismo si fue idea del director o del director con la productora María Luisa Gutiérrez, pero desde luego a mí me pareció muy buena idea.

-Referente al surf, tal como se promocionaba la peli, creía que iba a ver más trama surfera a lo Le llaman Bodhi.

-¿Sabes lo que pasa? El surf es un poquito una especie de alivio visual. En este tipo de películas donde hay una investigación es todo un poco claustrofóbico, por eso tienes que meter alguna persecución o algo de acción. En los thrillers norteamericanos siempre hay paisajes que alivian. Es un alivio cinematográfico que descongestiona la trama de ir buscando la intriga. No hemos hecho El gran miércoles, el surf es marginal en nuestra película.

-Háblame ahora un poco de tu futuro. Este año ruedas con Fernando Trueba la segunda parte de La niña de tus ojos, ¿no?

-Yo a muerte con eso, pero no me han llamado todavía. Sí que he hablado con Fernando, hace un año y medio que nos dijo que le había estado dando vueltas a qué sería de La niña de tus ojos quince años después, y a mí me pareció alucinante. Como todos los rodajes que suceden tanto tiempo en el extranjero, éste fueron tres meses en la República Checa con ese grupo de actores formado por Jorge Sanz, Antonio Resines, Neus Asensi, la Sardà…

 

 

 -En ese elenco se echaba en falta a Gabino Diego…

-Nosotros no le echamos en falta. Yo personalmente, como estaba Bonilla ya tenía bastante con Bonilla (risas). Yo no cambiaría nada, ni una coma de esa película. Nos hicimos como una familia, fue alucinante, estábamos día y noche juntos.

-¿Seguirás de colaborador en diferentes programas como “El hormiguero” o “Tu cara me suena”?

-Es probablemente de la cosas que más me gusta hacer en la vida. En “Tu cara me suena” he disfrutado muchísimo, pero tengo una obligación contractual y con mi público: voy a hacer Torrente 5.

-¿Aún te quedan amiguetes para sacar en los cameos?

-Ojalá no me quedaran… Me sigue regañando gente. “¿Cómo es que no he salido yo?”, me preguntan. “Porque son cuatro películas y somos muchos”, les digo…

-Ahora que hablamos de eso, ¿cómo conseguiste sacar a Oliver Stone en Torrente 3?

-Oliver Stone había visto en esa época Torrente 2 en Los Angeles, y estábamos negociando para comprar el remake. Quería hacer el remake de Torrente 2 en Estados Unidos.

-Se publicó que sonaba Jack Black para protagonizarlo…

-No, la gente piensa en él porque se trata de un gordo americano, pero Oliver veía a Jack Nicholson, y yo le decía “sí, hombre, sí”… Me parecía una locura. Ya que Oliver Stone estuviera hablando conmigo me parecía una locura, pero bueno, el caso es que cuando vino a España le dije: “Oliver, tío, estoy rodando Torrente 3, ¿te apetece salir?”, y dijo: “Venga, voy”. Lo que pasa es que vino un poco “perjudicado”. Tenía que hacer de borracho y no tuvo que esforzarse mucho (risas). La verdad es que quedó acojonante.

-También sacaste a John Landis, ¿no?

-Sí, John Landis es uno de los precursores de meter a todos sus amigos directores. En Cuando llega la noche estaba toda la plana mayor de Hollywood de directores.

Aún así, nadie superará todos los cameos que han aparecido en los Torrente. Denlo por seguro.

 

 

Santiago Segura, el brazo tonto de la ley venusvillera

 

TRES 60. Estreno en Venusville: 26/07/2013

 

Facebooktwittermail

No hay comentarios

Agregar comentario