Categorías

TRIPLE 9 crítica: Loca academia de choricillos

Reparto coral de polis corruptos que compiten por ver quién la tiene más larga en Triple 9

ROBERT THORNHILL

Qué sería de la historia del cine sin esos polis que se deslizan por la estrecha cuerda que separa el bien del mal, ya sea por el egoísmo de conseguir dinero fácil, por sentir la irresistible atracción de una mujer fatal o simplemente por hacer uso del poder que le da ser el brazo fuerte de la ley. Escenas como ver a Richard Gere agenciándose a la mujer de Andy Garcia en Asuntos sucios o a un cachondo y salido Michael Douglas follando a lo bestia con una testigo tan lujuriosa como Sharon Stone en Instinto Básico, serían impensables en un mundo donde los agentes del FBI fueran tan aburridos como el agente Mulder y su casta compañera Scully, que no se llevan ni un lápiz de la oficina por miedo a ser abducidos por alguna nave extraterrestre.

Pues los polis corruptos que van jugando a dos bandas y los personajes de ambiguo comportamiento son los que llevan la voz cantante en Triple 9, donde John Hillcoat hace un vuelta y vuelta del cine sangriento de Tarantino y del cercano y callejero de David Ayer, aderezado con un guión que firmaría Spike Lee, dando como resultado una historia que se supedita totalmente a la acción: robos, persecuciones, tiroteos, explosiones y enfrentamientos violentos a gogo que hace que uno se fije más en los aciertos de la peli que en las lagunas argumentales que deja a su paso. Si David Ayer ha ido desmenuzando los claroscuros de la profesión policial con pelis como Vidas al límite, Dueños de la Calle o Sin tregua, aquí Hillcoat les da la estocada a los azules y no se corta ni un pelo en describir el cuerpo policial de Atlanta como si fuera Loca academia de policia, donde cada uno va a su puto rollo hasta el punto de que un genial jefazo como Woody Harrelson (en mangas de camisa) tiene que arengarlos con un cómico discurso donde les espolea para que muevan el culo.

 

Triple 9: thriller de acción

"La próxima vez contratamos a los de Fast & Furious para que nos hagan el trabajo"

 

Con un reparto tan coral, el tiempo y el protagonismo en pantalla se va repartiendo compitiendo en “a ver quién la tiene más grande”, en que las conversaciones siempre tienen incrustado algún “fuck” suelto para que quede claro que la peli es de machos-machotes. La típica dualidad entre el bien y el mal característica del género nos coloca a un Casey Affleck con el calzón blanco felizmente casado y con un hijo, una versión adulta de Ethan Hawke en Training Day o de Jake Gyllenhaal en Sin tregua, y casi podríamos decir que con el calzón negro y en la otra esquina del cuadrilátero tenemos a todos los demás: a toda una gradación de los niveles del mal. Fuera del cuadrilátero toca colocar a una Kate Winslet irreconocible con un peinado de delito y un extraño acento aún por determinar, y a un Woody Harrelson que va apareciendo a cuentagotas, pero que esa actitud pasotil como si se tomara a broma todo lo que está pasando supone un soplo de aire fresco en una peli que, aunque lo intenta, no destaca por sus diálogos chisposos.

“Con un reparto tan coral, el tiempo y el protagonismo en pantalla se va repartiendo compitiendo en a ver quién la tiene más grande”

Siendo honestos, hay un punto débil en Triple 9, y es esa mafia rusa que dinamita todos los sucesos que van pasando en la película y que dista mucho de ser la de aquellas familias de camaradas que se reunían en la sauna en Promesas del este, o esos proxenetas bolcheviques a los que Denzel Washington se cargaba en The Equalizer con un sacacorchos. Lo único que vemos aquí es a una escuálida banda que protege a su líder femenina allá donde va demostrando poca maldad en sus actos y cuya mayor fechoría es usar al hijo de uno de los atracadores para chantajearlo y que haga así lo que ellos son incapaces de hacer. Unos mierdecillas, vamos.

 

Triple 9: thriller de acción

"No fardes tanto por ser el Halcón que mi hermano mayor es Batman"

 

Además, tampoco es que su líder Kate Winslet haga el papel más memorable de su carrera, o que esa idea de que la mujer del capo de la mafia rusa disfrazada de Sharon Stone en Casino se ponga al mando de la banda de delincuentes rusos acabe de funcionar: no nos acaba de convencer ese forzado y poco convincente acento ruso, y ese extraño peinado la hacen parecer más una madame de un prostíbulo de lujo que de la jefa de la temible mafia rusa.

Pero bueno, tampoco seamos puristas y busquemos tres pies al gato: el poder disfrutar de dos grandes atracos, tres o cuatro persecuciones, el que se imponga un ritmo de serie de televisión que no deja espacio a pensar mucho con algunas escenas que obligan a clavar los ojos en la pantalla (como esas tres cabezas encima de un coche), y esas adrenalíticas confrontaciones cuerpo a cuerpo típicas del género de acción, hacen que uno se tenga que congratular con la película y decir aquello de que no se puede pedir más… que tampoco John Hillcoat es Michael Mann o Martin Scorsese, ni se puede pedir llegar al nivel de Infiltrados o Heat.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Copas de yate

INF VNV 4

Recomendada por Kuato a: aquellos que quieran ver a Wonder Woman en bikini luciendo tipazo. Sin duda está wonderful.

No recomendada por Kuato a: los que no soportan ver miembros amputados como en Saw. Aquí hay algunas escenas desagradables, la verdad

Ego-Tour de luxe por: la confidente transexual negra de Woody Harrelson. Sin duda se merece un spin-off.

Atmósfera turbínea por: se vuelve a cumplir el tópico: hispanos, negros y rusos, los malos de la peli. Para qué matarse, ¿no?

 

TRIPLE 9. Estreno en Venusville: 06/05/2016

 

Facebooktwittermail

No hay comentarios

Agregar comentario