DYING IN THE LIGHT noticia: Paul Schrader contra los productores

<La pelicula de la polémica. Lean primero esta sinopsis: "Evan Lake es un agente de la CIA que descubre que está comenzando a perder la vista, hasta el punto de que es muy probable que llegue a quedarse completamente ciego al cabo de un tiempo. Mientras lucha contra esta ceguera, que cada vez se hace más fuerte, tiene que enfrentarse a la última misión de su trabajo, tras la cual tiene la intención de retirarse".

Aquí donde lo ven, este aparentemente inofensivo thriller escrito y dirigido por Paul Schrader en el que Nicolas Cage interpreta a un agente de la CIA que se está quedando ciego y que debe aceptar una última misión, esconde una bomba de neutrones como pocas se han dado en la historia del cine. Y lo más triste del caso es que es por motivos extra-cinematográficos. Paul Schrader reniega de ella alegando que los productores, no satisfechos con el resultado final, la han modificado a su gusto sin su consentimiento, hasta el punto de no reconocerla como propia. El propio Schrader, y los actores Nicolas Cage y Anton Yelchin, y Nicolas Winding Refn (director de Drive y Sólo Dios perdona, que aquí ha cedido su nombre como productor ejecutivo) en solidaridad, han protestado fotografiándose con camisetas que muestran una clausula del contrato que se prohíbe que el equipo artístico hable mal de la política, a modo de solicitud de respeto artístico y denuncia por coartar su libertad de expresión.

Desafortunadamente, Paul Schrader ya fue víctima hace diez años de los malvados productores de Morgan Creek cuando decidieron tirar a la papelera todo lo que había rodado de la precuela de El exorcista, El exorcista: el comienzo, y contrataron a Renny Harlin para que la rehiciera al completo, o sea que la desgraciada relación de amor-odio que tiene este hombre con la industria ya viene de lejos./>