GHOSTLAND crítica: Casita de muñecas

Cuentecito de Pascal Laugier con muñecas que no son precisamente de Famosa, en Ghostland

Pascal Laugier llevó el cine de torturas a límites estratosféricos con Martyrs, una película que por ello no dejó indiferente a nadie y de la cual incluso ya se ha hecho un remake a pesar de que se realizó hace sólo once años. Tras ese atracón de torturas que dejaba tan mal cuerpo, le llegó la oportunidad de cruzar el charco, concretamente a Canadá, con El hombre de las sombras, un thriller psicológico que distaba mucho de su predecesora, pero que a pesar de no ser una mala película no obtuvo el reconocimiento esperado y mucho menos la repercusión mediática de Martyrs.

Viendo que los resultados de su incursión en el thriller no fueron los previstos, seis años después el amigo Pascal vuelve a lo suyo, al cine de terror con Ghostland. La trama no es que sea muy enrevesada: un par de psicópatas que parecen sacados de La matanza de Texas o Las colinas tiene ojos irrumpen con gran violencia en una casa aislada (que parece estar decorada por una mente un poquito enferma), aterrorizando a una madre y a sus dos hijas (la irrupción del gigantón calvo entrando como un toro Miura es toda una declaración de intenciones, y hasta aquí puedo leer...).

"Es la última vez que me echo de novio a un fan de Annabelle"

Desde que los dos títulos clásicos citados, dirigidos por Tobe Hooper y Wes Craven respectivamente, llegaron a la gran pantalla, las familias salvajes y retorcidas en el cine han sido un referente a la hora de generar monstruos en las creaciones realizadas con posterioridad, que han perdurado hasta nuestros días: desde la perturbada madre y sus hijos de El día de la madre, pasando por los amigos psicópatas de Funny Games, hasta llegar a la más reciente familia Firefly, sacada del imaginario de Rob Zombie en La casa de los 1.000 cadáveres y sus dos secuelas.

"A favor de Ghostland juega la ambientación de la mansión, antigua y repleta de muñecas, que no son de Famosa precisamente.... Por lo demás, poco más"

Es cierto que la pareja de tíos chungos que invaden la casa dan mal rollo, pero no lo es menos que no son unos personajes novedosos. Por un lado está el jefe, que es quien domina el cotarro, con un aspecto hermafrodita, una especie de híbrido de Marilyn Manson, Mario Vaquerizo y Cruella de Vil. Por su parte, el gigantón empanado no deja de ser un clon de cualquiera de los forzudos retrasados de las familias de psicópatas de las películas mencionadas. Eso sí, nuestro amigo va más salido que el palo de un churrero y nos lo demuestra repetidas veces levantando por los pies a sus presas y oliéndoles el sexo (como método de ligue, personalmente no lo recomiendo). Ambos son unos personajes planos que no están desarrollados y que solamente tienen la función de asustar al personal.

"¡Peor es estar casada con un fan de Leticia Sabater!"

El giro argumental de Ghostland es interesante aunque poco creíble, pero una vez despejado (y esto no pasa hasta entrada la mitad de la película), la historia pierde frescura, ya que nos encontramos con la típica película de psicópatas y de víctimas que tratan de huir como sea de los primeros. A favor de Ghostland juega la ambientación de la mansión, antigua y repleta de muñecas, que no son de Famosa precisamente, que transmiten muy mal rollito. Por lo demás, poco más, incluido el desenlace final, que parece sacado de un telefilm barato y que no hace honor a lo que uno espera de Laugier.

Evidentemente que Ghostland no busca ni quiere entrar en competencia con Martyrs por lo que respecta a escenas truculentas, ya que el nivel de tortura de esta última es difícilmente alcanzable, pero nos deja unos cuantos momentos de violencia considerables, como la lucha del neo-Vaquerizo con la madre, o los enfrentamientos del gigantón con las hermanas (al menos nos llevamos por delante una buena dosis de puñaladas). Si a estos momentos se le hubiese unido una trama más trabajada y con más tensión, como sucede con otras películas de "home invasion", como Nosotros o Los extraños, el resultado hubiese sido más redondo.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Dos Caras Harvey

Recomendada por Kuato a: las niñitas que tienen su habitación repleta de muñecas y peluches enormes. Tras ver la película puede que hagan limpieza.

No recomendada por Kuato a: los agentes de policía locales. Los auténticos pringados de todos los slasher. Yo de ellos me manifestaría en protesta, ya.

Ego-Tour de luxe por: el neo-Vaquerizo. Un villano que podía haber dado más de sí, sobre todo si le hubiesen dado algún diálogo que echarse a la boca.

Atmósfera turbínea por: el final. Más pobre que Will Smith en Buscando la felicidad. A Pascal Laugier se le debe exigir más.

■ GHOSTLAND. "Ghostland" (FR-Canadá, 2018). Dirección y guión: Pascal Laugier. Reparto: Crystal Reed, Mylène Farmer, Anastasia Phillips, Emilia Jones, Taylor Hickson, Kevin Power, Rob Archer, Mariam Bernstein, Alicia Johnston, Ernesto Griffith, Adam Hurtig, Denis Cozzi, Sharon Bajer, Tony Braga, Paul Titley. Estreno en Venusville: 20/09/2019.