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MAMÁ TE QUIERE crítica: Amor de mala madre

Sarah Paulson se pasa de la raya como fan fanática de ¿Qué fue de Baby Jane? en Mamá te quiere

EL HOMBRE DE BOSTON

El Covid-19, alias SARS-Cov-2, alias coronavirus, alias puto coronavirus, alias puto coronavirus de los cojones, se ha apuntado otra muesca en su cinturón al cobrarse otra víctima cinematográfica que ha visto como su estreno en salas comerciales se ha ido al traste optando por el estreno en plataforma televisiva. Mamá te quiere debía haberse estrenado en cines el pasado 20 de noviembre y ha acabado recalando dos meses más tarde en Movistar, cual barco naufragado a la deriva. Peor habría sido que se hubiera quedado en un cajón hasta ser descubierta accidentalmente años más tarde como Mel Gibson en Eternamente joven, pero en Venusville abogamos por los aplazamientos de los estrenos comerciales hasta que lleguen tiempos mejores, como se está haciendo con la mayoría de grandes blockbusters.

Pero Mamá te quiere no es un gran blockbuster, ni un blockbuster pequeñito, ni siquiera un blockbuster a secas, es un psicothriller modesto con aires de peli noventera, que sigue la línea de títulos como La mano que mece la cuna, Misery o Mujer blanca soltera busca, con un psicópata protagonista perteneciente taxonómicamente a la familia de los cuidadores (ni a los serial killers, ni a los amantes despechados, ni a los acosadores: ¡a los cuidadores!). Una madre que cuida a su hija adolescente aquejada de parálisis, asma, diabetes, cardiopatía, y cincuenta mil disfunciones más, entre las que sólo faltan las enfermedades venéreas. Una madre que guarda más de un as en la manga, claro, porque si fuera una madre de las que se conforma con el CD de rancheras de Julio Iglesias el Día de la madre, ya no habría película.

 

"Que sea la última vez que como cuidador pides al negro de Intocable"

 

Un thriller con psicópata que no inventa la sopa de ajo, pues es un psicothriller clásico basado en la relación dominancia-sumisión de dos personajes compartiendo un espacio común, como también era ¿Qué fue de Baby Jane? Con una factura modestita que no desentonaría como producción televisiva de sobremesa, si quieren, pero con gran vocación cinematográfica al estar descrito y contado con total corrección, y con un gran manejo del suspense en las secuencias que lo requieren. Hasta se permite incluir algún guiño a grandes clásicos del suspense y del terror como Alfred Hitchcock y Brian De Palma, siendo La ventana indiscreta y Carrie, respectivamente, los títulos más obvios (di que sí, Aneesh Chaganty, que más copió Ben Wheatley a Hitchock en el remake de Rebeca para Netflix, y bien churrito que le salió).

Mamá te quiere es un thriller con psicópata que no inventa la sopa de ajo, pero con un gran manejo del suspense en las secuencias que lo requieren”

Y con dos actrices de convincente interpretación que cargan con éxito sobre sus espaldas la responsabilidad de que la peli funcione. Sarah Paulson ya es una actriz de carácter con gran experiencia gracias a pelis como Los archivos del Pentágono y 12 años de esclavitud, y series como American Horror Story y American Crime Story, pero Kiera Allen tiene el mérito de debutar con esta peli con un papel tan jodidamente difícil como el suyo. Normalmente, las pelis de psicópatas que van por parejas suelen tener a ambos actores protas conocidos como gancho comercial (último ejemplo La viuda, con Isabelle Huppert y Chloe Grace Moretz), pero Mamá te quiere se la juega (y gana) apostando por una joven actriz cuya única experiencia en su curriculum es un anuncio de cereales.

 

“Deja de llorar y te compro un mono como el de Atracción diabólica

 

El problema de Mamá te quiere, o mejor dicho sus problemas, porque son dos, son primeramente su previsibilidad. Ya hemos dicho que pese a su corrección no inventa la sopa de ajo, por eso no es complicado adivinar qué ingrediente va a utilizarse en cada momento y qué sabor va a aportar, desde el momento que sabemos que es una sopa de ajo. Y el segundo, padecer el “Síndrome del psicópata al que le pisan el callo”, o sea mostrar a un psicópata frío y calculador que es capaz de disimular durante 20 años que es un psicópata, jugando a ser el vecino perfecto que ayuda a los ciegos a cruzar la calle y a las ancianitas a bajar la basura, y un día porque alguien le pisa el dedo gordo del pie, se transforma de golpe y porrazo en el Demonio de Tasmania enviando al garete la tapadera.

Por todo ello, Mamá te quiere debe verse como un psicothriller de serie B correcto que aunque no aporte nada nuevo al género por presentar una propuesta más vista que el culo de Mel Gibson, aprovecha con acierto sus escasos elementos para crear el suspense requerido y contar una historia que funciona a pesar de su simplicidad y de su incredibilidad final. Nada de lo visto cuela una vez descubierto el pastel, pero si son ustedes espectadores con tragaderas suficientemente amplias como para valorar el ejercicio independientemente de su coherencia, de esos que opinan que lo importante no es el destino sino el camino, encontrarán un entretenimiento la mar de arregladito  y resultón. Siguiendo con la analogía de la sopa de ajo, Mamá te quiere es como una sopa de ajo que no les embriagará, pero tampoco les repetirá.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Dos Caras Harvey

INF VNV 3

Recomendada por Kuato a: Mario Casas. Como él también va en silla de ruedas en El practicante, a ver si hay algo que hacer con Kiera Allen.

No recomendada por Kuato a: aficionados a puzles y rompecabezas acostumbrados a que todas las piezas encajen.

Ego-Tour de luxe por: habernos quitado el mal sabor de boca que nos dejó la semana pasada La maldición de Lake Manor como thriller con paralíticos en silla de ruedas.

Atmósfera turbínea por: que no se explique cómo hace la madre todo lo que hace. O mejor que no lo explique, así no la cagan.

 

MAMÁ TE QUIERE. Estreno en Venusville: 22/01/2021.

 

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