MEL GIBSON noticia: El nuevo ligue de Mel

<Mel Gibson tiene nueva novia: se llama Stella Mouzi, tiene 25 años, es griega, y su profesión no la adivinarían nunca (exacto, ¡modelo!, no sabemos cómo se les ha podido ocurrir…). O sea, que nuestro sargento Riggs se está beneficiando a una griega de 25 tiernos añitos que está para mojar pan.

No nos malinterpreten, al Diario de Venusville se la repamplimfan los romances, bodas y separaciones de los famosos. Con su pan se lo coman, y allá cada cual con lo que hace en su casa mientras que Dios esté en la de todos, siempre y cuando claro está, que no sean casos como los de Sean Penn cuando lo engancharon en una habitación de hotel borracho perdido con dos rusas en la cama… ¡estando su ex mujer Denise Richards y su hija en la habitación de al lado!

Pero el caso de Mel Gibson es un caso especial. Porque su vida privada está afectando a su vida profesional más de lo que es habitual en estos casos, hasta el punto de cancelar hasta nueva orden (siendo optimistas) su proyecto de dirigir una de vikingos con Leonardo DiCaprio de protagonista, y eso sí que no lo consentimos.

Porque han sido tantas, y tantas seguidas (su detención por conducir borracho tras proferir insultos racistas a la población judía mientras la culpaba de todos los males del mundo, las conversaciones telefónicas en las que amenazaba a su ex novia Oksana Grigorieva, los presuntos malos tratos conferidos a ésta, su posterior separación y la lucha por la custodia de la hija de ambos de 20 meses, la muerte de su agente…), que el hombre se quedó hace ahora exactamente un año, sin novia, sin hija, sin productores, sin proyectos y, según él, solo y sin amigos.

Por eso ha vuelto a las funciones de actor para otros en trabajos como El castor, How I Spent my Summer Vacations (próximamente), y quién sabe si Arma letal 5. La idea es recuperar su imagen y la confianza de los productores, a base de cultivar buena prensa, buenas críticas (como las conseguidas con El castor), y relaciones estables sin escándalos.

Y ahí es donde entra su nueva novia, además de que si Mel Gibson se siente feliz, más ganas de vivir tendrá, más emprendedor se sentirá, y más triunfará en la vida (igualito que quien desayuna cereales con fibra y pone el huevo por la mañana). Así que Stella, reina, a hacer contento a nuestro William Wallace sin negarle nada, sea lo que sea lo que te pida, y tú por tu parte, Mel, a portarse bien y a no liarla más durante un tiempecito, al menos hasta que vuelvas a tener amarrado el proyecto de los vikingos./>