Categorías

SITGES 2018: LO QUE ESCONDE SILVER LAKE crítica: Miedo y asco en Los Angeles

Juego de rol detectivesco por Hollywood con Andrew Garfield en Lo que esconde Silver Lake

RAY ZETA

David Robert Mitchell es un autor al que hay que seguirle la pista. Con It Follows nos lo olimos y ahora con Lo que esconde Silver Lake lo confirmamos. Y no sólo por  ser ambos dos títulos excelentes cada uno en su género, sino también por pertenecer ambos a dos géneros tan diferentes como el terror y el cine negro. Sólo faltaría que con su tercera película le diera por hacer un western, un musical o una action movie, y quedaría automáticamente consagrado como un genio. Porque no dudamos que fuera el que fuera el género elegido, David Robert Mitchell volvería a clavarlo. Si en la antigua Mili se les suponía el valor a los soldados, a Robert Mitchell le suponemos el talento.

Y en Lo que es esconde Silver Lake hay talento y mucho. Si con It Follows el guionista-director se ceñía a una única trama, con Lo que esconde Silver Lake emplea a su antojo mil y una subtramas que exploran mil y una capas y hablan de mil y un temas. La principal es sólo una, sí, Andrew Garfield buscando por Los Angeles a Riley Keough tras conocerla en un fugaz encuentro, pero Robert Mitchell la utiliza para retratar el Hollywood más hipster, describir la soledad de sus habitantes y plasmar su vació existencial con personajes estrambóticos, fiestas superficiales y call girls aspirantes a actriz, además de denunciar la manipulación a la que nos somete la cultura pop y el consumismo.

 

Lo que esconde Silver Lake

"Si eres Spider-Man, ¿por qué no sales en las pelis de los Vengadores?"

 

Y todo ello lo hace sin perder su esencia de cineasta indie ya desde el inicio de la película con toda una declaración de principios: la presentación del personaje de Andrew Garfield fumando, follando y hablando de masturbación. Tres prácticas que representan la antítesis del cine comercial, más interesado en vender entradas que en contar historias. Como el plano posterior del mismo Garfield dirigiéndose desorientado hacía el Hollywood Sign, acaso como metáfora de la misma desorientación del director para decidir hacía dónde dirigir su carrera ahora que todas las majors se lo están rifando.

"Lo que esconde Silver Lake es una obra maestra sin parangón que confirma a su creador David Robert Mitchell como el cineasta más prometedor del panorama actual"

Pero no olvidemos que Lo que esconde Silver Lake es una historia detectivesca de cine negro, envuelta en una pátina de cine fantástico, en la que Robert Mitchell nos sumerge a modo de juego moviendo fichas que no necesariamente conducen a ninguna parte: códigos encubiertos, mensajes subliminales, leyendas urbanas, personajes misteriosos que aparecen y desaparecen, teorías conspirativas, planes trazados por mentes maestras, referencias cinéfilas y poperas a tuti pleni... Elementos que se dan la mano confundiendo realidad y ficción sin que el espectador llegue a saber a ciencia cierta si lo que ve en pantalla está sucediendo de verdad, lo que enervará a más de uno aunque en realidad no importe.

 

Lo que esconde Silver Lake

"Anímate imaginando que sales en Spider-Man: Un nuevo universo"

 

Porque a fin de cuentas Lo que esconde Silver Lake no es más que un viaje interior iniciático y de redención personal que se mueve entre lo surrealista y lo absurdo, con ecos de David Lynch, Terry Gilliam, los hermanos Coen, Paul Thomas Anderson, Alfred Hitchcock y hasta Billy Wilder (sí, Billy Wilder, ¿acaso no era El crepúsculo de los dioses un cuento gótico que criticaba Hollywood con mil y una referencias al cine clásico? Pues Lo que esconde Silver Lake ídem de adem), contado a través de los ojos de Andrew Garfield, un actor que pese a haber sido Spider-Man, interpreta todos los registros posibles con tal de no encasillarse, como demuestran Hasta el último hombre, Silencio, y esta misma de Silver Lake.

Así de buena es Lo que esconde Silver Lake, una obra maestra sin parangón que como toda genialidad podrá ser amada u odiada, pero que confirma a su creador David Robert Mitchell como el cineasta más prometedor del panorama actual. Independientemente de sus resultados en taquilla por su condición de película indie, y de la misma manera que su genialidad emerge de los enigmas que plantea y no de su resolución (ya saben, eso de que lo importante es el viaje y no el destino), quizás Lo que esconde Silver Lake no será un éxito comercial, pero les puedo asegurar que se convertirá en un cult movie al instante. De hecho ya lo es.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Venus Hall of Fame

INF VNV 5

Recomendada por Kuato a: la llamada Generación X del siglo XX, para que comparen su sosa Reality Bites con la magistral Lo que esconde Silver Lake.

No recomendada por Kuato a: espectadores comodones que necesiten que se les dé el resultado de la suma 2 + 2.

Ego-Tour de luxe por: la escena del compositor. "Gallina de piel", que decía Johan Cruyff...

Atmósfera turbínea por: que esté mal visto que un protagonista fume, beba, folle, fume hierba y pegue a niños, como Andrew Garfield hace en Lo que esconde Silver Lake.

 

SITGES 2018

 

Facebooktwittermail

No hay comentarios

Agregar comentario