ASEDIO entrevista a Miguel Ángel Vivas y Natalia de Molina: Asediados

Miguel Ángel Vivas, Natalia de Molina y Bella Agossou, asediados por la prensa de Barcelona

HOTEL CATALONIA EIXAMPLE 1864, BARCELONA, 27/04/2023. Siempre que hablo de Miguel Ángel Vivas cuento la misma anécdota. Pensarán de mí que soy peor que el abuelo Cebolleta, pero es que al igual que el chiste de la vieja que le fue infiel a su marido cincuenta años atrás, y se sigue confesando por ello porque le gusta recordarlo, a mí me gusta recordar cómo conocí a Miguel Ángel Vivas. Fue en el Festival de Sitges de 2010 durante la presentación de Secuestrados. Vivas hizo un llamamiento general para identificar una película de Johnny Cash en la que interpretaba a un secuestrador, porque la había visto de pequeño por televisión y apenas la recordaba. Esa noche averigüé que la película era Five Minutes to Live (Bill Karn, 1961) y al día siguiente así se lo comuniqué. Desde entonces, cada vez que coincidimos me presento como “el que le encontró la película de Johnny Cash”, y él vuelve a darme las gracias sonriente.

-En la presentación de Inside me contaste que tú quedaste muy contento con Secuestrados, pero los productores no tanto, y que con Extinction fue al revés: los productores quedaron muy contentos, pero tú no tanto. ¿Con Asedio habéis quedado por fin todos contentos?

-MIGUEL ÁNGEL VIVAS (M.A.V.): Contento no, contentísimo (risas), y con Tu hijo también. He vuelto a buscar mi voz, la que ya tenía en Secuestrados, en la que pese a ser una película de encargo me sentí muy a gusto. En Tu hijo volví a por ella, y todo lo que aprendí en Tu hijo de mí mismo, lo he empleado en Asedio. Me dije que no me iba a salir de lo que yo sé hacer, de cómo lo sé hacer y de cómo cuento las cosas. Con Asedio me he ido descubriendo a mí mismo. Estoy muy contento, a mí me encanta la película, pero claro, el niño de uno siempre es guapo, pero como parece que la película está gustando, parece que el niño sí ha salido guapo (risas).

-La canción de las amazonas Agojie la conocemos de La mujer rey… ¿Casualidad o espionaje industrial?

-M.A.V.: No conocíamos La mujer rey porque cuando rodamos la nuestra aún no había salido, la canción sale de Bella Agossou. Cuando le hice el casting, me contó que las guerreras Amazonas vienen de su país, Benín, el antiguo reino de Dahomey. Por eso cuando ella y Natalia de Molina deciden al final enfrentarse al mundo, se convierten en Amazonas.

Bella me contó la historia de la canción, es una canción que cuando se canta ya no hay marcha atrás, vamos a la guerra. Le pedí que me la cantara, me la cantó y flipé con la fuerza que tenía. Me contó lo que dice la letra, y pensé que esa canción estaba escrita para nuestra película, así que decidí empezarla con lo que dice la letra, y acabarla cantándola.

-¿Y más adelante viste La mujer rey?

-Fui a verla por curiosidad, pero no tiene nada que ver con nuestra película...

-¿Y tú Natalia, cómo llegaste al proyecto?

-NATALIA DE MOLINA (N.D.M.): Me llamaron. El productor Enrique Lavigne me habló de ella, y a Miguel Ángel le conocí en la fiesta final del rodaje de Adiós. Recibí el guión a los pocos meses, tuve una videollamada con Miguel Ángel (era la época COVID), y así empezó todo, pero él siempre ha dicho que me quería a mí para la película.

M.A.V.: Siempre tuve clarísimo que tenía que ser Natalia, pero el productor me dijo que pensara en un plan B porque Natalia es la actriz del momento, y podía ser que por agenda, porque no le gustase el guión, o por cualquier otro motivo, dijera que no. Yo le dije que OK, que me diera unos días para pensarlo, así que al cabo de unos días me llamó y yo le dije: “No, no hay segunda opción. Tiene que ser Natalia”. Si ponía opción B, estab engañándome.

-Es la película más de acción que has hecho y el papel más físico que has tenido, ¿verdad? ¿Cómo fue la preparación?

-N.D.M.: Es la primera vez que hago de policía y la primera película de acción que hago. Adiós tenía un componente de acción, pero la llevaban los otros personajes... Estuve entrenando mucho físicamente para poder dar todo lo que el guión pedía, y también tuvimos un asesor varias semanas que era miembro de la policía, con ejercicios y explicaciones para que entendiéramos todo el trabajo de los Antidisturbios, que además estuvo con nosotros en el rodaje.

-Debió de ser un rodaje duro por las complicadas secuencias: acción, figuración, movimientos de cámara… ¿Resultó difícil rodar el plano secuencia del enfrentamiento entre polis y vecinos?

-M.A.V.: A mí no me resultó difícil porque lo tenía todo muy preparado, y además se dio la conjunción que todo el mundo iba muy a favor de obra. Hubo mucha magia. Un plano secuencia tan complicado como el desalojo, lo empezamos a ensayar y vi claro que iba a salir. Ya en el primer ensayo vi que todo el mundo entendía la película desde el principio, esa es la magia.

-N.D.M.: Pero esa magia la consigue Miguel Ángel, nos metía a todos donde él quería y como él quería, a todos los departamentos. Todo el mundo veía lo que él quería.

-M.A.V.: Es la secuencia que he hecho además con más figuración. Empieza ya en el furgón, enfocamos a Natalia, se baja, seguimos con ella, ciento y pico figurantes para la acción, entramos en el edificio con ella, y todavía nos quedan cuatro plantas para arriba y para abajo en el mismo plano. Es lo más complicado que hemos hecho nunca.

-N.D.M.: Y lavadoras cayendo del cielo… (Risas).

-Hay un momento en la película que Natalia decide si se marcha o se queda. Yo lo llamo el “Momento Bruce Willis en Pulp Fiction”. ¿Te sentiste Bruce Willis cuando lo interpretabas?

-(Risas) He tenido muy presente a Bruce Willis en la preparación de este personaje, no sólo Pulp Fiction, también La jungla de cristal, es un icono de la acción, yo crecí viendo todas sus películas, por eso está presente en el inconsciente. También estaba presente Sylvester Stallone, Arnold Schwarzenegger… y también Sarah Connor.

-M.A.V.: Todos los action heroes de los 80, claro… Es que esta película nació de muchas cosas, una fue Asalto al distrito de la comisaría 13 de John Carpenter, que es mi director favorito. Yo me crié viendo películas de videoclub y el cine de acción de los 80 toda mi vida, fue luego cuando fui tirando a los 70 para ver más.

-¿Y qué me decís del final? Tranquilos, que no vamos a hacer spoilers…

-M.A.V.: A mí lo que más me gusta del final es esa mirada entre los dos personajes de Bella y Natalia. La película se construye a partir de dos puntos de vista hasta que se encuentran en esa mirada. Para mí esa mirada era todo, yo estaba muy asustado el día que la rodamos, el último día de rodaje, porque sabía que teníamos una gran película, pero si esa mirada no funcionaba, no habría película. Era tan grande lo que tenía que pasar ahí, que cuando pasó, fue lo más bonito que me ha pasado en mucho tiempo. Cuando vi cómo se estaban mirando, pensé: “Tenemos la película”.

-¿Tuviste siempre claro que acabarías la película de esa manera?

-M.A.V.: Había otra versión de guión, pero cuando estuvimos en cuarentena por el COVID, me di cuenta que había una cosa que me cabreaba, que era que todo el mundo echaba balones fuera para echarle la culpa a los demás: a los gobiernos, a los vecinos, a los partidos... Yo pensé: ¿y qué hacemos nosotros para que el mundo o nuestro entorno sea mejor? Hay una frase que está en el cartel y que yo me he llevado de por vida, que es: “Si no eres parte de la solución, eres parte del problema”.

Los conflictos morales de los personajes no son ni blanco ni negro, cuando llega el momento de la verdad, los personajes deciden. Natalia decide dejar de ser parte del problema y pasar a ser parte de la solución, por eso cuando se miran las dos mujeres, Natalia se reconoce en Bella. Son dos mujeres que quieren lo mismo. Exceptuando esa mirada, lo demás es trama, y a mí la trama no me interesa, a mí me interesan las emociones, lo que se cuenta a golpe de dilema moral y a golpe de emociones. La trama dejémosla para la ficción.

“La trama dejémosla para la ficción”... Gran titular de final de entrevista marca de la casa de Miguel Ángel Vivas, que me recuerda el que me dejó en el Festival de Sitges de 2010 durante la entrevista que mantuvimos a raíz de Secuestrados. En ella, Vivas declaró: “la violencia es muy dura, pero no le dejo al público un momento de reflexión para que piense lo que ha pasado. Si quieres reflexionar sobre ello hazlo mañana, hoy súfrelo”, y así se lo recuerdo leyéndoselo en voz alta. Queda tan impresionado con su propia y contundente declaración, que me pide que le envíe la entrevista completa. A partir de ahora seré “el que le encontró la película de Johnny Cash y el que le envió la entrevista de Sitges 2010”.