BIENVENIDOS A MARWEN crítica: Un muñeco viene a verme

Mezcla de cine real y animado como si fuera El castor + Toy Story en Bienvenidos a Marwen

A Robert Zemeckis le va la marcha, de eso no hay duda. Sólo un director ávido de emociones fuertes reacio a apoltronarse en su sillón de dire comercial taquillero en permanente éxito, gracias a títulos como Forrest Gump, Contact y Náufrago, se liaría la manta a la cabeza y emprendería una aventura tan arriesgada como la animada por motion capture con Polar Express, Beowulf y Cuento de Navidad, hasta acabarla con el estrepitoso fracaso que supuso la producción Marte necesita madres. Batacazo que le obligó a regresar otra vez al cine convencional con nuevos éxitos como El vuelo, El desafío y Aliados, para poner otra vez en riesgo su nuevamente adquirida estabilidad con una marcianada como Bienvenidos a Marwen.

Porque Bienvenidos a Marwen es una obra inclasificable que trata mil y un temas diferentes de mil y una maneras, de esas que tan poco les gustan a los americanos, acostumbrados a que todo se lo den masticado, tragado y digerido. Cine real y cine de animación, cine denuncia y cine fantástico, drama y comedia, amor y desamor… Todo eso es Bienvenidos a Marwen, una muestra del talento de Robert Zemeckis puesto al servicio de una historia real tan dura como emotiva: la de un dibujante de cómics amante del fetichismo que tras las secuelas psicológicas provocadas por una brutal paliza, substituye los dibujos por fotografías a muñequitos, evadiéndose en un mundo imaginario sito en la Segunda Guerra Mundial.

"Anímate, Barbie y Ken hace 60 años que tampoco pueden hacerlo"

Como Un monstruo viene a verme, Sucker Punch, Donde viven los monstruos o Un puente a Terabithia. Imaginación al poder, pero como esto es un producto Zemeckis y no Bayona, se deja el sentimentalismo hiper-edulcorado no apto para diabéticos de banda y se prioriza la fantacción con un héroe militar norteamericano en la Francia ocupada de la Segunda Guerra Mundial, rodeado de las más sexies "soldadas" a medio camino entre Malditos bastardos y Sucker Punch (Jessicas Rabbits en miniatura, que habrá que ver qué dicen de ellas las feminazis). Presenciamos así el día a día del personaje protagonista interpretado soberbiamente por Steve Carrell, a la vez que seguimos las misiones bélicas de su alter ego de ficción hasta que ficción y realidad se confunden en una misma.

"Cine real y cine de animación, cine denuncia y cine fantástico, drama y comedia, amor y desamor… Todo eso es Bienvenidos a Marwen"

Parte de ficción que es animada nuevamente por captura de imagen con los actores transformados en muñecos (ya ven que en lo que a la captura de imagen se refiere, este tío es incorregible), y que da forma a una aventura pulp de la Segunda Guerra Mundial en la más pura tradición tebeística. Un cuentecito bélico muy, pero que muy pulp, con héroes norteamericanos muy buenos y nazis muy malos, que capta nuestro interés desde el primero momento, y que como en Operación Overlord lleva la acción al límite a base de combates, tiros y explosiones, por mucho que la historia del personaje real protagonista sea un dramón como un pino. ¿Qué esperaban? Robert Zemeckis es el hombre que dirigió Tras el corazón verde, Regreso al futuro y ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, y no Kieslowski aún cuando narra una depresión.

"Sí que es una putada para los muñequitos... ¡Pero nosotros sí podemos!"

Tanto es así que Bienvenidos a Marwen respira el estilo Zemeckis por los cuatro costados, con elementos que recuerdan algunas de sus películas previas. Desde ver a Steve Carell sentado en un banco en la más pura estampa Forrest Gump, sustituyendo la caja de bombones por una caja con muñequitos, a un DeLorean que vuelve a protagonizar un viaje en el tiempo. Además de otras referencias a títulos que ya no son propios, como el mundo burbuja que se construye el protagonista, que recuerda El show de Truman, o Diane Kruger como sexy mini bruja Pirula, en un personaje que parece inspirado en el de Marion Cotillard en Origen. Además de los títulos bélicos mencionados y los que llevan una pancarta con el lema "Imaginación al poder".

Robert Zemeckis demuestra pues seguir estando en forma, arriesgando y proponiendo nuevas fórmulas. Es de lejos el director que mejor ha sobrevivido a los 80 junto a Steven Spielberg, por delante de compañeros de generación como John Landis o Joe Dante, relegados al triste cementerio de elefantes televisivos. Por eso espero que Bienvenidos a Marwen triunfe en Europa a pesar del fracaso que está siendo en Estados Unidos. Es lo que les decía al principio, la peli toca demasiados palos y es demasiado compleja como para ser del gusto de los norteamericanos, por eso confío en que los europeos la valoren como se merece. Una marcianada fantástica tan bien hilvanada como ésta bien lo merece, y más si quien la firma es Robert Zemeckis.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Copas de yate

Recomendada por Kuato a: los espectadores europeos, que ya está visto que los americanos no entienden.

No recomendada por Kuato a: quien quiera ver un tebeo de la Segunda Guerra Mundial sin dramones por el medio. Que se pongan Operación Overlord.

Ego-Tour de luxe por: qué quieren que les diga, es salir un DeLorean, aunque sea una imitación en miniatura, y no poder contener el aplauso...

Atmósfera turbínea por: que no se produzca un spinoff de las aventuras del Capitán Hogie y su comando de sexies malditas bastardas.

■ BIENVENIDOS A MARWEN. "Welcome to Marwen" (EUA, 2019). Dirección: Robert Zemeckis. Guión: Caroline Thompson y Robert Zemeckis. Reparto: Steve Carell, Leslie Mann, Merritt Wever, Eiza González, Gwendolyn Christie, Janelle Monáe, Leslie Zemeckis, Diane Kruger, Neil Jackson, Siobhan Williams, Stefanie Von Pfetten, Matt O'Leary, Falk Hentschel, Nikolai Witschl y Matthew Kevin Anderson. Estreno en Venusville: 01/03/2019.