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SITGES 2012: LO IMPOSIBLE rueda: Tsunami de babas

   

Tsumani de babas

Las babas de todos los periodistas que
no paran de salivar tras ver la película

Por Ray Zeta

 

<Ni al oceáno Índico de la costa tailandesa, ni al mar Mediterráneo por estar en la capital del Garraf; el tsunami de Lo imposible vivido hoy en Sitges se ha debido a las babas de los periodistas presentes en la rueda de prensa, que han piropeado, enjabonado y peloteado salivando a más no poder a Juan Antonio Bayona en cada una de sus intervenciones. No ha habido reportero que tomara la palabra a excepción de nosotros, que no iniciara su intervención felicitando al director por el excelente trabajo realizado y por la película. Juan Antonio Bayona, aún así, suficientemente inteligente y gato viejo ya en estos menesteres a pesar de ser Lo imposible sólo su segunda película, recibía las felicitaciones con cara de póker y sin aspavientos, pues él como nadie sabe que por muchas florecitas que te echen, puedes tirarte cuatro años para levantar un nuevo proyecto como le ha pasado tras El orfanato.

   Con una barba quizás dejada para la ocasión (será para parecer más un director de cine, pues el año pasado estuvo de miembro del jurado la mar de afeitadito), Bayona ha tenido a su lado a Tom Holland, jovencísimo actor inglés que interpreta en la película al hijo mayor del matrimonio protagonista. Un chaval que por lo que hemos podido ver tanto en la película como en la rueda, demuestra ser pese a su corta edad un profesional como la copa de un pino tanto dentro de la pantalla como fuera de ella, pues a diferencia de otras jóvenes estrellas que hemos tenido la oportunidad de conocer en otras ediciones del festival (me estoy acordando de la repelente Abigail Breslin en la presentación de Bienvenidos a Zombieland), se ha comportado con toda discreción y simpatía, siendo consciente del papel secundario que le tocaba ejercer y cediéndole por ello el protagonismo a Bayona, director del film. Que cuiden pues a Tom Holland y que lo mimen como se merece, no sea que de descarríe como Macaulay Culkin, Edward Furlong, Brad Renfro y compañía.

 

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Tom Holland y J. A. Bayona, supervivientes del tsunami baboso de Sitges

 

   Y es que ambos tienen muy bien aprendido el discurso que les toca a cada uno, pero lo defienden con tanto entusiasmo y convicción, que cualquiera diría que es un discurso cien por cien natural sin aditivos ni artificios salido del corazón. El de Juan Antonio Bayona, que los auténticos protagonistas de la película son los personajes reales en los que se inspira la historia, que la madre de la familia ejerció de asesora durante todo el proceso de guión y rodaje, y que pese a todo lo visto en la película aún se quedaron cortos, pues la tragedia real estuvo plagada aún de un mayor número de vicisitudes y desventuras que de haberlo sacado en el film hubiera acabado por no resultar creíble pese a ser verdad, y que la película expone el desastre natural como contexto de una historia de superación personal en la que lo realmente imposible es volver a la normalidad y recuperar la vida habitual después de vivir una experiencia de esta envergadura.

 

  "El tsunami se ha debido a las babas de los periodistas que han piropeado, enjabonado y peloteado a Juan Antonio Bayona en cada una de sus intervenciones"  

 

   Y en cuanto a Tom Holland, descubierto por Bayona por protagonizar en Londres el musical “Billy Elliot” (sabiéndolo se diría que guarda cierto parecido con Jamie Bell de jovencito, y no solo por las orejas…), que se quedó sin palabras al conocer al hijo real que él interpreta sólo de pensar por lo que había pasado, y que el rodaje fue duro tanto a nivel físico por deber estar muchas horas dentro del agua, como a nivel emocional por deber expresar sentimientos relacionados con la muerte de seres queridos, pero que gracias a la dirección de Juan Antonio Bayona y a la ayuda que recibió de Naomi Watts, que le aconsejó, le apoyó y le ayudó en todo momento, cobijándolo bajo su ala como mamá gallina cuidando de su polluelo, y al buen clima existente con el equipo de actores, con los que llegó a formar unos lazos tan fuertes como si de una familia real se tratara, pudo salir airoso de su primera experiencia cinematográfica.

 

"La próxima será un remake de El coloso en llamas para que los actores estén secos y calentitos"

 

   Y así, entre salivaciones, peloteos y ensalzamientos de los valores humanos y familiares ha ido transcurriendo la rueda. Sobre lo estrictamente cinematográfico, Bayona ha contado que la parte de la película que tiene el mar como protagonista (la llegada de la ola, la riada posterior y el periplo de Naomi Watts en el agua), fue rodado en estudio durante un mes en la Ciudad de la luz, Alicante, y la parte con exteriores en Tailandia. A nuestra pregunta sobre su posible influencia de Steven Spielberg (no digan que los planos en los que muestra el mar como amenaza no son clavados a Tiburón, y que las secuencias del niño correteando por el hospital no parecen copiadas de El imperio del sol), ha dicho sentirse halagado pero que en todo caso son influencias inconscientes por haber crecido con el cine spielberguiano. Y a si confía en tener posibilidades de cara a los Oscars, se muestra cauto por tratarse de una película de producción cien por cien española aunque la distribuidora la estrene en diciembre y la promocione con ese fin.

   Y es que tal como ha dicho con cierto tono melancólico, “cuando la película se estrena aquí, puedes llamar a tus amigos para que vayan a verla, pero cuando se estrena allí no tienes a nadie a quien llamar y entonces te das cuenta de lo difícil que es”. Di que sí, Juan Antonio, lo mismo dijo Lluís Llach después de llenar el Camp Nou en uno de sus conciertos, que por mucho que cantes ante más de cien mil personas, luego en casa no tienes a nadie quien te prepare un vaso de leche, pero no estés triste, que a nosotros los de Diario de Venusville puedes llamarnos cuando quieras./>

 

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