HELLBOY crítica: El demonio que pudo ser rey

Reboot de Hellboy a cargo de Neil Marshall más parecido a El niño que pudo ser rey que a Hellboy

¿Que cómo diferenciar a Hellboy de Pikachu, para no equivocarnos de sala, coincidiendo ambos en la cartelera? Fácil, Hellboy es el que se lima los cuernos... Ah, bueno, sí, y también es el demonio rojo de más de dos metros, mientras que Pikachu es el pokémon amarillo de menos de medio metro... En todo caso, con quien no han de confundir este Hellboy es con el de los dos dirigidos por Guillermo Del Toro en 2004 y 2008 con Ron Perlman, pues este de Neil Marshall es un reboot que parte de cero con toda la plantilla renovada, a la cabeza David Harbour como Hellboy e Ian McShane como profesor Trevor Broom, más las incorporaciones de Sasha Lane y Daniel Dae Kim como Alice Monaghan y el mayor Ben Daimio, respectivamente.

Un Hellboy que a diferencia de su antecesor ya empieza la película como agente de la A.I.D.P. (Agencia de Investigación y Defensa Paranormal), aunque nos cuenten su origen a lo largo del metraje para que nadie se quede en Babia, y con el que tenemos sentimientos encontrados. Como adaptación del personaje creado por Mike Mignola está mucho mejor conseguido que el de Del Toro, pero como película es una propuesta totalmente fallida por tener un guión que hace aguas por todas partes hasta resultar ridícula en su conjunto. Una lástima, porque el principio del filme con la presentación del personaje apunta maneras, pero a la que se desvela la trama principal y el guión se va revistiendo de capas, se va a pique con pasaje, tripulación y violinistas.

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Y eso que a diferencia del de Guillermo Del Toro, este de Neil Marshall es acertadamente un Hellboy más oscuro, más violento, más gore, más cafre, y con más mal aliento. Mejor recreado en definitiva que el de Guillermo Del Toro, empeñado en contar siempre cuentos de hadas mostrando el lado amable de los personajes, aunque se traten de demonios del inframundo. Y a pesar también de estar al servicio de una película que no da respiro al espectador por encadenar una action piece con otra a ritmo de canción machacona, entre tiros, porrazos y mamporrazos, aunque tanta acción continuada acabe por empachar, como si nos abrieran la boca con un fórceps y nos metieran por el gaznate un atracón de churros freídos con aceite de dudosa calidad.

"Hellboy es una propuesta totalmente fallida por tener un guión que hace aguas por todas partes hasta resultar ridícula en su conjunto"

Porque es una acción sin justificar, gratuita y de relleno la mayor parte (hagan la prueba y verán que no retienen en la memoria ninguna escena), alternando episodios de factura impecable con otros de producción paupérrima que provocan una vergüenza ajena indigna de un producto como este, por mucho que su vocación sea la serie B. Además de basar la conducción de dichas set pieces en unos giros de guión nada creíbles, que no hacen más que revolucionar la peonza hasta acabar en un exagerado festival de efectos, traca y casquería, más cercano a una comedia fantástica juvenil imposible de tomar en serio, como Ghostbusters o Pesadillas, que de una película de acción fantástica para adultos como quiere ser Hellboy.

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A lo que tampoco ayudan los personajes, por colaborar aún más en hacer de este nuevo Hellboy un despropósito narrativo de magnitudes elefantiásicas. Ni los agonistas como el profesor Broom (sus diálogos con Hellboy son dignos de Groucho y Chico Marx) o Alice Monaghan y Ben Daimio por estar metidos con calzador (sobre todo Alice), ni los antagonistas como la Blood Queen (mira el "Sálvame" pese a estar desmembrada) o el jabalí antropomorfo Gruagach (ojo al motivo que le lleva a ir contra de Hellboy), ni artistas invitados como Lady Hatton, la bruja Baba Yaga, el rey Arturo o el mago Merlín (especialmente sangrante es la aparición de este último). Sólo se salva Lobster Johnson por la recreación humorística que de él hace Thomas Haden Church.

Demasiadas ideas mal desarrolladas en el guión, y demasiados personajes ridículos poblándolo, acaban por enviar al traste nuestras esperanzas de ver una nueva película de Hellboy bien construida, con cara, ojos, cola y cuernos, después de que Guillermo Del Toro se quedara sin realizar el tercer episodio con Ron Perlman. Las dos entregas dirigidas por Guillermo Del Toro no son tampoco grandes películas (que no se me enfade nadie, que no son ni Alien, ni En busca del arca perdida, ni Terminator), pero al menos mantienen un balance positivo satisfactorio, que es más de lo que podemos decir del Hellboy de Neil Marshall, por muy bien plasmado que esté el personaje, y por muy oscuro y cafre que sea el tono imprimido. Si al menos saliera Abe Sapiens... pero ni eso.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Congelada en carbonita

Recomendada por Kuato a: quien vaya a ver Pokémon: Detective Pikachu y se confunda de sala.

No recomendada por Kuato a: quien ya tuvo bastante de leyendas artúricas infantiles con El niño que pudo ser rey.

Ego-Tour de luxe por: la recreación de David Harbour como Hellboy. A ver si algún manitas de la informática es capaz de insertarlo digitalmente en las dos pelis de Guillermo Del Toro en lugar de Ron Perlman.

Atmósfera turbínea por: que este Hellboy parezca más una aventura de Dylan Dog que de Hellboy.

■ HELLBOY. “Hellboy” (2018). Dirección: Neil Marshall. Guión: Andrew Cosby, Christopher Golden y Mike Mignola. Reparto: David Harbour, Milla Jovovich, Ian McShane, Sasha Lane, Penelope Mitchell y Daniel Dae Kim. Estreno en Venusville: 17/05/2019.