THOR: EL MUNDO OSCURO artículo: Desde Asgard con amor

Desde Asgard con amor

El héroe, el reino, el hermano traidor, el elfo
oscuro y su poder, y otras cosas del meter

De Walt Disney Company

<En 1962, el dúo –ahora legendario– de Stan Lee y Jack Kirby presentó “The Mighty Thor” a los lectores de Marvel Comics, inaugurando una nueva era de acción y aventuras con su visión del dios nórdico del martillo. Pese al sonido nórdico de los nombres, la historia tenía raíces familiares, conflictos universales que han impulsado los dramas humanos desde el principio de los tiempos: un hijo impaciente por demostrar su valía a su padre, un hermano letalmente resentido y una mujer que ayuda a un hombre a ver el mundo de nuevo.

Para crear el conflicto, los realizadores le dieron a Thor un adversario digno: el maléfico Malekith. Presentado en junio de 1984, en la edición número 344 de Thor, Malekith es el líder de los Elfos Oscuros, quienes viven en Svartalfheim, uno de los Nueve Mundos. Después de haber entrado en guerra con los Nueve Mundos y de haber sido derrotados por Asgard, los Elfos Oscuros eran considerados extintos. Pero Malekith puso a los elfos sobrevivientes y a su planeta en hibernación durante muchos años, hasta el momento en el que estuviera listo para vengar el universo y convertir la luz en oscuridad, una vez más. Malekith y los Elfos Oscuros resultarán formidables enemigos, gracias a su violenta y personal historia con Asgard.

"Somos parientes lejanos de los orcos de El Señor de los anillos y primos de los elfos de Merlín"

Chris Hemsworth repite aquí su papel como el Poderoso Thor, dios del Trueno. El actor australiano, dueño de un físico capaz de enfrentarse a hombres y dioses, estaba encantado de volver al ruedo. La última pieza del emocionante rompecabezas fueron Loki y Tom Hiddleston. Este último no dudó en ponerse los zapatos de Loki una vez más. Con Malekith, el villano de otro mundo, a bordo de la película, los realizadores estaban dispuestos a ofrecer al público referencias y mundos con los que pudiera identificarse. El director Alan Taylor fue el primero que quiso darle al film un sustento real, con una textura descarnada y una sensación valiente. Taylor dice: “Cuando me uní al proyecto, quería conseguir un poco más de ese sentido de la mitología nórdica, la calidad de los vikingos, la textura, la historia y su peso”.

"Para crear el conflicto, los realizadores le dieron a Thor un adversario digno: el maléfico Malekith, líder de los Elfos Oscuros, quienes viven en Svartalfheim, uno de los Nueve Mundos"

Como resultado, todos los aspectos de Thor: El mundo oscuro –desde las localizaciones hasta los enormes platós exteriores, los vestuarios, los peinados y maquillajes, los armamentos, las armaduras y los efectos visuales– debían estar cuidadosamente diseñados y conectados a la realidad, con más guiños a la era de los vikingos que a la ciencia ficción. Alan Taylor sentía que era imperativo que el planeta natal de Thor, Asgard, “luciera como si hubiese estado allí por siglos; que tuviera su propia cultura, que sea un lugar creíble”. Con estas órdenes de marcha, el diseñador de producción Charles Wood fue el encargado de dar vida a Asgard. “Un gran reto fue hacer la película tan fantástica como fuera posible, porque ésa es la naturaleza de este tipo de films, pero también de anclarlo y de crear ambientes que sean tangibles y realistas”.

"Esto de Asgard es como una feria de Tatooine en la Tierra Media"

Wood continúa: “En el primer film, en general nos quedamos dentro del palacio, mientras que en esta película realmente exploramos la ciudad. Queríamos ser fieles a la idea concebida tanto dentro del Universo Marvel como de la mitología nórdica, de que Asgard era una ciudad de oro, pero queríamos también aportar un sentido histórico a este mundo. Deseábamos conseguir crear la idea de que Asgard había existido durante miles de años”. Para crear Asgard y otros universos dentro de los Nueve Mundos con credibilidad, el director y los realizadores sintieron que la mejor forma de lograrlo era empleando una combinación de localizaciones reales con sets amplios, detallados y construidos para la ocasión.

Crear Asgard fue el mayor reto de todos, y también involucró la mayor cantidad de platós. Para la inspiración inicial, Wood y su equipo recurrieron a los cómics y a todo el material de Thor escrito por Kirby que pudieron encontrar. Luego ampliaron su investigación, tal como explica Wood: “También consultamos imágenes en Internet, reparando en su arquitectura y en su atmósfera; todo lo que íbamos hallando que nos parecía que podía funcionar para la película. Estudiamos todo tipo de influencias arquitectónicas distintas, históricas y modernas; si eran bizantinas, románicas, góticas, chinas o islámicas. También se estudió la luz y la atmósfera. Luego nos fuimos al estudio y nos reunimos todos. Alan Taylor dio su opinión sobre ello y, desde ese momento, básicamente, comenzamos a conceptualizar la película”./>

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