MEGALODÓN 2: LA FOSA crítica: Cthulhu vs Scarface

A Jason Statham se le vuelven a quedar pequeñas las sardinas en escabeche en Megalodón 2

Cinco añitos después vuelven Jason Staham y sus megalodones, a los que nos estamos acostumbrando a ver con asiduidad como si se tratasen de un banco de sardinas. Así como en la anterior entrega la dirección corrió cargo de un casi desaparecido Jon Tuterltaub, en Megalodón 2: La fosa se ha confiado en, agárrense los machos, ¡Ben Wheatley!, director de cine fantástico independiente que nos sorprendió hace unos años con un must see como Kill List o la divertida Turistas, y que con el paso de los años se ha vendido al cine comercial sin mucha fortuna (su remake de Rebeca para Netflix así lo demuestra).

Qué explicar del argumento de Megalodón 2: La fosa... Mejor nos lo ahorramos porque de una película en la que salen tiburones gigantes poca chicha vamos a sacar. Esperar unas cuantas escenas espectaculares, mucha acción y poco más. ¿Se cumple esta premisa? Sólo en parte, lo que hace que el producto final sea un poco aguado. Me explico: a pesar de que el leit motiv de la película son los megalodones, en buena parte de la misma estos brillan por su ausencia. Wheatley nos ofrece un batiburrillo de escenas de acción interconectadas de forma bastante torpe, con un escaso hilo argumental e intentando apabullar al espectador a golpe de CGI.

"Si con las sardinas te quedas con hambre, pilla la oferta del pulpo del Día 2x1"

Lo dicho, con la excusa del tiburón, Wheatley nos apabulla con una sucesión de escenas inspiradas sin ningún pudor en clásicos del género. La espantada de turistas en la playa como en Tiburón, la inmersión a las profundidades como en The Abyss, la lucha con monstruos submarinos cegados por la luz como en Pitch Black, una invasión en la plataforma científica como en Alerta máxima, un ataque del meg que recuerda al que sufría Samuel L. Jackson en Deep Blue Sea, el ataque de una especie de animales prehistóricos sacados de Jurassic Park... Si hasta tenemos un toque lovecraftiano, con un cefalópodo gigante sacando sus tentáculos a pasear por la pantalla.

“Wheatley nos ofrece un batiburrillo de escenas de acción interconectadas de forma bastante torpe, con un escaso hilo argumental e intentando apabullar al espectador a golpe de CGI”

Todo este conglomerado de escenas es mezclado por Wheatley de forma mecánica. Muy espectaculares, sin duda, pero enlazadas como si estuvieses montado en una atracción de un parque temático, una detrás de otra. A su favor, que la película no se ha hace pesada y que uno está esperando cual será la siguiente machada que nos deparan Jason Statham y los suyos. En contra, que con la excusa del megalodón, la película discurre por estos derroteros hasta llegar a la última media hora, que sí que ofrece lo que hemos estado esperando hasta ese momento.

"¡Toma bota perfumada de las tres pelis de Los mercenarios!"

Cuando el protagonismo corre a cargo de los escualos, la película se vuelve más loca, pero al mismo tiempo más intensa y divertida: el super megalodón con una cicatriz imponente que le cruza la jeta, el pulpo de “La llamada de Cthulhu” y sus mega-tentáculos, la lucha entre los megs y el cefalópodo… Y sobre todo, Jason, que nos depara las escenas más inverosímiles, pero que son las que el público está esperando, como ir montado en una moto de agua, arpón en mano, a la caza en pleno mar de los megalodones (pa chulo yo), o aguantar con la fuerza de su pierna la boca del bicharraco para evitar ser comido, o el enfrentamiento final con el tiburón scarface (a qué guionista se le habrá ocurrido semejante idea...).

Tampoco juega a favor de Megalodón 2: La fosa el poco nivel de los antagonistas de Statham: Sienna Gillory se pasea escasamente por la película en un papel muy diluido, y Sergio Peris-Mencheta pone la parte de acción, pero su personaje no se acaba de entender y pasa con más pena que gloria (está visto que no tiene mucha suerte con los papeles que ha interpretado Sergio en su aventura americana…). A pesar de las expectativas creadas, es una pena que Megalodón 2: La fosa, por el resultado obtenido, se parezca más a un Sharknado que no a una producción que ha costado unos cien millones de dólares. A ver si para la tercera espabilan.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Dos caras Harvey

Recomendada por Kuato a: incondicionales de Jason Statham. No es que sea su mejor película, pero aquí puede lucir su chulería innata sin complejos.

No recomendada por Kuato a: los que seguían los documentales de tiburones de Jacques Cousteau. Igual encuentran la película un pelín exagerada.

Ego-Tour de luxe por: el arponazo que se casca Jason para la lucha final con el megalodón. Para que luego digan que el tamaño no importa.

Atmósfera turbínea por: el personaje de la niña. Ya me sobraba en la primera parte y en esta segunda, más todavía.

■ MEGALODÓN 2: LA FOSA. Estreno en Venusville: 04/08/2023.