PROMOCIÓN FANTASMA crítica: En ocasiones veo muertos

En ocasiones veo muertos El niño de El sexto sentido se ha hecho mayor, le ha crecido barba, y ahora es profe del club de los cinco Por Ray Zeta

<“De los creadores de Spanish Movie”, debería decir el cartel, porque los responsables del primer spoof del cine español, o sea Eneko Lizarraga y Francisco Sánchez Ortiz en la producción, Javier Ruiz Caldera en la dirección, y Alexandra Jiménez, Silvia Abril, Carlos Areces y Joaquín Reyes como representantes de la interpretación, vuelven a la carga con una nueva combinación de comedia y cine fantástico, esta vez teniendo en su punta de mira las comedias juveniles y los fantasmas noventeros.

   Imaginen a Patrick Swayze quedándose en el limbo no como salía en Ghost, sino como un estudiante de último curso de bachillerato, y que quien puede oírlo no es Whoopy Goldberg sino un profesor que además puede también verlo porque como Haley Joel Osment en El sexto sentido y Michael J. Fox en Agárrame esos fantasmas, tiene el superpoder de ver a los muertos que se pasean por la tierra con una asignatura pendiente. Imaginen también que Swayze no se queda solo sino que lo hace con un par de sus colegas de Rebeldes (los chulitos y guapetones Tom Cruise y Rob Lowe, por ejemplo) y un par de chatis para combatir el aburrimiento. Tendremos pues cinco fantasmas de estudiantes de instituto atrapados en tierra, y un solo profesor capaz de ayudarles. O lo que es lo mismo, tendremos Promoción fantasma.

 El club de los cinco... fantasmas

   Más comedia que película cómica como era Spanish Movie, y más comedia también que película fantástica, Promoción fantasma es en realidad una puesta al día de El club de los cinco (desde el argumento a los personajes, pasando por el bailecito a ritmo de Radio Futura; solo las fotos de promoción ya son toda una declaración de principios, comparen la colgada con el cartel de la de John Hughes y ya me dirán), y de las comedias de John Hugues en general, que de los fantastiques noventeros fantasmales citados (Ghost, Agárrame esos fantasmas y El sexto sentido a la cabeza), aunque tenga también referencias directas a clásicos fantásticos de los 80 como son Ghostbusters (esos libros levitando en la biblioteca) o Regreso al futuro (substituyendo el “Johnny B. Good” de Chuck Berry por el “Estoy aquí” de Shakira), como regalo a los espectadores de la generación a la que representan pertenecer sus espectrales protagonistas.

   Una comedia juvenil que pese a beber culturalmente pues de los mediados de los 80 (ya que los cinco fantasmas protagonistas han quedado anclados en 1986), hace las mínimas referencias a esos años de forma directa para que el joven público de hoy no se sienta desplazado como un pulpo en un garaje cuando la vea (Nacha Pop, George Michael, Michael Jackson y los eventos deportivos son los únicos temas por los que se interesan los personajes; ya puestos podrían haber preguntado también si Gremlins, Lady Halcón o Regreso al futuro tuvieron secuela, o si series como V, El Equipo A o El coche fantástico se siguen emitiendo), y se sienta identificado con ella y con sus jóvenes protagonistas, al encarnar estos a los típicos prototipos estudiantiles del género (el rebelde rockero, el deportista ligón, la empollona repelente, la guarrilla –con perdón-, y el fiestero). Llegamos a estar en Estados Unidos y fijo que nos endosan también el negro y el latino de turno.

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   Más acertados están en cuanto a construcción los personajes adultos, con Raúl Arévalo a la cabeza como una versión crecidita barbuda de Haley Joel Osment dedicado a la docencia (la película podría haberse titulado perfectamente “El sexto sentido: 20 años después”), secundado por unos Carlos Areces y Joaquín Reyes, que como buenos chanantes se autointerpretan como padre de la asociación y psiquiatra respectivamente, disponiendo de las mejores escenas de lucimiento a nivel cómico de la función (diálogo gay sobre El coche fantástico y culo con papel de ídem mediante). Todo lo contrario de Silvia Abril, relegada aquí a una combinación de doña Lío y el Santiago Segura-Jose Mari de El día de la bestia, metida en la trama a martillazos.

   Film simpaticote pues y agradable de ver para jóvenes y no tan jóvenes, tanto como comedia estudiantil como fantastique fantasmal, un tanto irregular en general tanto en personajes (prototipos vs. originales) e interpretación (actores jóvenes vs. actores adultos), como en estructura por sucederse episodios mejor resueltos que otros, que aunque ligeramente inferior a Spanish Movie, para nada desmerece las expectativas depositadas en él como segunda película de un director al que las vírgenes oráculos le auguran una carrera larga y feliz./>

INFORME VENUSVILLE
		Sentencia Quaid: Dos Caras Harvey
		Recomendada por Kuato a: quien tenga curiosidad por saber qué ha sido del niño de El sexto sentido veinte años después.
		No recomendada por Kuato a: fans de El coche fantástico que se fijaran más en David Hasselhoff que en Kid.
		Ego-Tour de luxe por: la frase “Vigilad los cambios y no os perdáis” antes de la actuación musical, sacada tal cual de Regreso al futuro.
		Atmósfera turbínea por: si en Spanish Movie sacaron el cameo de Leslie Nielsen como actor de spoofs, no haber sacado aquí a Joel Haley Osment o a Michael J. Fox como visionador de fantasmas.