Matt Damon explota de celos al coincidir con el rodaje de El legado de Bourne
Un año y medio justo es lo que hace que dura el culebrón Bourne. La primera noticia que publicamos al respecto fue en junio de 2010. Y la cosa sigue y sigue, como el conejito de Duracell…
No es cuestión de repetirles el culebrón capítulo a capítulo, basta con decirles en una breve sinopsis que al apostar Universal por un guión de Tony Gilroy en vez de por uno de Paul Greenglass, éste amenazó con abandonar la saga, los estudios no cedieron, la abandonó por la puerta trasera, y luego fue Matt Damon quien sorprendentemente lanzó un ultimátum a la Uni diciéndoles que si Paul Greengrass se iba él también. Más sorprendente fue que los estudios no hicieron nada para mantener a la estrella de la saga, así que Damon se marchó con viento fresco, y la Universal, a rey muerto rey puesto, contrató a Jeremy Renner para que continuara como prota la franquicia del agente desmemoriado, con dirección del mismo Gillroy.
Y a partir de aquí, declaraciones y más declaraciones entre ambos bandos, diciéndose de todo menos bonitos (lo raro es que aún no los hayamos visto tirándose los trastos a la cabeza en “La noria” y en el “Sálvame”). Y cuando llevábamos unos meses tranquilitos, ¡zas!, Matt Damon vuelve a atacar, al parecer, por un calentón al coincidir casualmente en Canadá con el rodaje del nuevo Bourne mientras él está con el de Elysium.
Ataque que ha tenido lugar desde las páginas de la revista GQ mientras Damon concedía una entrevista de promoción de Un lugar para soñar, su última película (no la busquen en esta web, que no sale ningún alien, zombi ni psicho-killer). En ellas el ex Jason Bourne volvió a arremeter contra el guionista Tony Gillroy, afirmando que “la calidad del guión que entregó en 2007 para El ultimátum de Bourne, la tercera parte de la franquicia cinematográfica basada en las novelas de Robert Ludlum, ya fue detestable, y que lo que hizo fue desaparecer y dejar al director Paul Greenglass al frente del caos”.
Ahora Damon se ha retractado de estas palabras, confesando lo que les apuntábamos, que “todo fue consecuencia del enojo que le provocó descubrir mientras rodaba Elysium, que en el mismo complejo cinematográfico de Vancouver, acababa de empezar la filmación de El legado de Bourne”. El propio actor contó que podía ver el rodaje desde su tráiler y que cuando regresó a Nueva York no pudo demostrar su frustración ante el periodista de GQ, añadiendo que “fue una gran tontería por mi parte haber hablado de ese tema, y que en definitiva ese es un problema entre Tony y él, que tendrán que resolver o no”.
Así está el patio, con una rabieta de Damon, tal como vemos, que ni las del Pato Donald... En otra ocasión se lo pensarás dos veces antes de amenazar con abandonar una de las franquicias más millonarias de todos los tiempos. Tú tranquilo Mattito, que en esta vida nada es irreversible. Vin Diesel también abandonó la saga Fast & Furious, y ahora que ha vuelto mírala ahora, aún con más éxito de lo que tenía antes.
"Lo malo de ser amnésico es que no nos acordamos cuando la cagamos"
11 Respuestas