Categorías

SITGES 2018: EL AÑO DE LA PLAGA crítica: La invasión de los ultrafrikis

Novela de Marc Pastor y libre versión de La invasión de los ultracuerpos por el mismo precio

RAY ZETA

Ya está visto que adaptar una novela de éxito no garantiza una buena película ni mucho menos. Que Steven Spielberg sea capaz de coger una novela fantástica tan compleja y repleta de referencias cinematográficas y pop-culturales como "Ready Player One" y le salga un peliculón, no significa que quien coja una novela también fantástica con referencias de la misma índole pero más sencillita, tenga las de ganar. Y si no que se lo pregunten a Carlos Martín Ferrera, que creía que adaptando la novela de Marc Pastor "El año de la plaga" lo iba a tener chupado, y en lugar de eso ostenta el dudoso honor de haber obtenido no sólo la peor película de lo que llevamos de 2019, sino también la peor película del 2018, tal como quedó claro en el pasado Festival de Sitges.

"El año de la plaga" de Marc Pastor es un relato apocalíptico de tono costumbrista juvenil ambientado en Barcelona, que toma como modelo paródico La invasión de los ultracuerpos de Philip Kaufman (La invasión de los ladrones de cuerpos de Don Siegel de 1956, no, el remake de Kaufman del 78). Es una novela de ritmo trepidante, fino humor y múltiples referencias al cine y a la cultura pop, que como en Ready Player One están justificadísimas. Una combinación de ciencia ficción, suspense, terror, survival movie, romance y costumbrismo muy bien mezclados que, a la vista está, ha resultado demasiada diversidad de géneros para los responsables de su adaptación cinematográfica, que nunca han llegado a dar con el tono correcto.

 

EL AÑO DE LA PLAGA

"Con lo mala que era Body Snatchers y sólo se meten con nuestra peli"

 

Edgar Wright es un maestro a la hora de alterar el tono de una película, empezando como una comedia costumbrista y evolucionando hacia la comedia terrorífica o de ciencia ficción, como demostró en la trilogía del Cornetto. El año de la plaga en cambio, no presenta ni la más mínima evolución a lo largo de su metraje por muchos giros argumentales que posea la trama. Empieza como una comedia romántica, continúa introduciendo el elemento fantástico, y acaba en lo que debería ser la parte de terror combinada con la acción, pero sin conseguir plasmar ninguno de los tres géneros. Toda la película está narrada con el mismo tono soso y desangelado, muestre un beso romántico, un ultracuerpo gritando, o una horda de ultracuerpos persiguiendo al protagonista.

"El año de la plaga ostenta el dudoso honor de ser no sólo la peor película de lo que llevamos de 2019, sino también la peor película del 2018"

Especialmente sangrantes son las escenas de los ultracuerpos, viéndoles pegar su característico alarido de poseído a lo Chewbacca en clara copia del clásico de Philip Kaufman, interpretados por unos actores de nivel de primaria como si les hubieran pisado un callo. Mientras que en La invasión de los ultracuerpos el gritito de marras ponía los pelos de punta, en El año de la plaga no hace más que provocar las risas del respetable. Risas extensibles tanto a la mayoría de diálogos (el "momento Mauthausen" es de traca), como a las referencias cinematográficas (que al final sólo se han quedado en tres de nivel básico colocadas a destiempo ), como a las pocas escenas de acción y al resto de interpretaciones  (han debido contratar figurantes en vez de actores para ahorrar presupuesto).

 

EL AÑO DE LA PLAGA

"La próxima vez versionamos Buenas noches, Sr. Monstruo y santas pascuas"

 

Sólo se salva Ivan Massagué, que aguanta el tipo contra viento y marea, impasible a todo el despropósito que se mueve a su alrededor. El actor de El laberinto del fauno, de El barco, y de mil series más, hace gala de su profesionalidad ofreciendo una interpretación más que digna de joven hastiado de su entorno y desorientado vitalmente con el que es fácil identificarse, ajeno a las carencias generales de la película y a su pobre producción, más  cercana a la de una telemovie barata o a la de un cortometraje. Las localizaciones de Barcelona, las escenas de masas (si se les puede llamar masas), y las de acción (vean el clímax en el hospital), transmiten la sensación que El año de la plaga es más un vídeo amateur grabado entre amiguetes que una película profesional con vocación comercial.

O sea, que si ustedes creían que Secuestradores de cuerpos de Abel Ferrara o Invasión de Olivier Hirschbigel no habían salido bien como remake de La invasión de los ladrones de cuerpos y La invasión de los ultracuerpos, esperen a ver El año de la plaga. Carlos Martín Ferrera llamó la atención en su debut con la claustrofóbica Zulo hace quince años y ahora tiene pendiente de estreno el thriller La jauría, por lo que esperamos que demuestre con ella que El año de la plaga no ha sido más que un desafortunado tropiezo en su carrera, y que se encuentra más a gusto en el terreno de las historias originales en forma de thriller, que en las historias adaptadas en clave de comedia, terror, ciencia ficción, o lo que sea El año de la plaga. Algún día lo descubriremos.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Condenada a alforfones

INF VNV 1

Recomendada por Kuato a: aficionados a la jardinería amantes de tener plantitas en su balcón.

No recomendada por Kuato a: quien haya visto cualquier versión de La invasión de los ladrones de cuerpos.

Ego-Tour de luxe por: el cameo como taxista de Marc Pastor, autor de la novela. Único detalle de la peli que sorprende.

Atmósfera turbínea por: ¿por dónde empiezo?

 

SITGES 2018

 

Facebooktwittermail

No hay comentarios

Agregar comentario