TOM Y JERRY crítica: La aventura de Los Payasos de la tele

**Adaptación de Tom y Jerry más parecida a La aventura de Los Payasos que a los propios Tom y Jerry**

Adaptar una serie de dibujos animados no es fácil. En la mayoría de los casos la propuesta original es tan simplona y con tan poco donde rascar argumentalmente, que los guionistas se las ven y se las desean para llenar un metraje de noventa minutos con cara y ojos que no obligue a los creadores originales a apartar la mirada. Llevamos viéndolo desde los tiempos en que Superman vivía en Villachica y Batman en Ciudad Gótica: Los Picapiedra, Inspector Gadget, Las aventuras de Rocky y Bullwinkle, El Oso Yogui, Dora y la ciudad perdida… Y lo mismo ocurre con las adaptaciones de videojuegos infantiles como Pokémon: Detective Pikachu o Sonic. La película al presentar la misma dificultad.

La mayoría de estas adaptaciones, por no decir todas, se saldan con unos resultados dignos de salir corriendo a la velocidad de Usain Bolt así que salen los títulos de crédito. El guionista (o los guionistas, porque a día de hoy aún es un misterio digno de “Cuarto milenio” que estos guiones necesiten de equipos de guionistas –será para poder echarse luego la culpa unos a otros del resultado, digo yo-) se inventan el pretexto más cutre para justificar el argumento y luego llenan el metraje con gags tan forzados como desvinculados de la trama principal, dando como conjunto global un descalabro monumental. En Venusville deberíamos tener una categoría de puntuación especial para estos casos porque la condena a alforfones se queda corta.

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Imaginen pues cómo será la adaptación de Tom y Jerry, siendo el material original cartoons de no más de cuatro minutos, en los que lo único que sucede es un gato persiguiendo a un ratón y un gato peleándose con un perro. Unos cartoons que se basan exclusivamente en el slapstick de los trompazos que se da Tom en su empeño de atrapar a Jerry y en las hostias que recibe por parte del perro bulldog Spike. Inadaptable en forma de largometraje claro, a no ser que la persecución repleta de trompazos dure noventa minutos, o se invente una historia partiendo de cero que poco o nada tenga que ver con los dibujos animados originales, como Tom y Jerry la película ha hecho.

“La mayoría de estas adaptaciones se saldan con unos resultados dignos de salir corriendo a la velocidad de Usain Bolt así que salen los títulos de crédito”

Una historia que como habrán podido imaginar no tiene ni pies ni cabeza. Una historia que combina actores reales (cuando en los cartoons originales, lo único que salía de las personas eran sus piernas), con Tom, Jerry y Spike animados digitalmente, todos metidos en un hotel justificándolo de la manera más burda, y llenando el resto del metraje con personajes y subtramas absurdas que les permita a Tom y Jerry recrear sus persecuciones, y a Tom y Spike recrear sus peleas. Todo cuanto sale en la película, personajes, situaciones, diálogos y acción, se antoja más forzado que un elefante en un 600 y da como resultado algo más parecido a “La aventura” de Los Payasos de la tele que a los dibujos de Tom y Jerry.

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Tan monumental es la magnitud del despropósito que hasta los actores (en teoría buenos actores) se contagian del desastre y ofrecen unas interpretaciones lamentables. Chloe Grace Moretz simplemente no sabe interpretar frente a personajes imaginarios durante el rodaje que serán añadidos digitalmente posteriormente, y compensa su inexperiencia a base de jetos exagerados sobreactuando más que una animadora de fiestas infantiles. Y en cuanto a Michael Peña, su personaje es tan ridículo, que su interpretación es por ende también ridícula, sin que pueda hacer nada para remediarlo. Tras Fantasy Island y ahora Tom y Jerry, 2020 será un año que Michael Peña jamás olvidará.

Quizás adaptar cartoons de tan corta duración tan simples narrativamente sea una misión imposible, o quizás se deba ir al extremo opuesto para conseguirlo: idear un guión complejo donde los personajes del cartoon tengan cabida en una aventura de gran envergadura, como es el caso de las Space Jam, o como fue el de las dos entregas de Scooby Doo o el de Looney Tunes: De nuevo en acción. Una aventura que sea algo más que perpetrar destrozos en un hotel que va a celebrar la boda del siglo de la prensa rosa, poniendo de los nervios al personal del establecimiento. Eso no es una aventura, eso es “La aventura” de Los payasos de la tele.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Condenada a alforfones

Recomendada por Kuato a: nostálgicos de Los payasos de la tele, en especial de su sección “La aventura”.

No recomendada por Kuato a: los herederos de William Hanna y Joseph Barbera, sus creadores.

Ego-Tour de luxe por: lo bien dibujados y animados que están, eso sí. La peli es malísima, pero al César lo que es del César.

Atmósfera turbínea por: hacer de estas pelis productos totalmente infantiles, sin tener en cuenta el componente nostálgico del público adulto que veía estos dibujos animados en su niñez. ¡Snif!

■ TOM Y JERRY. Estreno en Venusville: 26/03/2021.