Categorías

SITGES 2017: WILLIAM FRIEDKIN rueda: Il divo

William Friedkin se muestra como un divo loquita mientras nos habla de su carrera y El Exorcista

RAY ZETA

Ni Madonna, ni Jennifer Lopez, ni Bianca Castafiore. Aquí el auténtico divo, al menos en esta edición del Festival de Sitges, es William Friedkin. 82 años, más estirado que un chicle, y más pegado de sí mismo que ni interpretando él solo a los dos mellizos de Pegado a ti, ejerce de estrella como si sus grandes éxitos, El exorcista, A la caza y The French Connection a la cabeza, se hubieran estrenado recientemente y no hace 45 años. Y para muestra un botón: estando la rueda convocada a las doce, y habiendo llegado él puntual como un clavo, se ha indignado porque la Organización del Festival llegaba con retraso, amenazando con marcharse a su habitación del hotel. El resultado: Friedkin yéndose enfadado, y el director del festival Ángel Sala persiguiéndole por los pasillos para convencerle de que se quedara.

Cosa que al final ha hecho, no sin antes dejar claro delante de la prensa asistente que el retraso no ha sido culpa suya porque él estaba allí a la hora en punto. A excepción de este incidente, Friedkin ha enseñado su mejor cara y su perfil más afable, bromeando incluso con el proceso de Independencia de Catalunya, y se ha mostrado encantado con cada una de las preguntas que le han formulado. La primera sobre El exorcista, claro, a día de hoy su mejor película y una de las más influyentes en la Historia del cine. Precisamente estuvo el año pasado en Roma filmando un exorcismo real autorizado por el Vaticano para un documental, y Friedkin reconoce que es un acto espeluznante. Mucho más que su película. Nunca había creído en posesiones, pero lo que vio en Roma puso en duda sus creencias.

 

WILLLIAM FRIEDKIN

"Aunque más espeluznante es Brácula: Condemor II"

 

En cuanto a su película, no tiene constancia de que hubiera censura en España ni en ningún otro país, y si tardó en estrenarse en diferentes países, fue porqué tardaron en tener a tiempo las diferentes versiones europeas, que él mismo supervisó personalmente: la española, la francesa, la italiana y la alemana, tomándole un año en total. Para la española le pidió a Fernando Rey, a quien conocía de haber hecho con él The French Connection, que se encargara del doblaje en castellano. Rey supervisó el guión en castellano, contrató a los actores de doblaje y les dirigió. Luego Friedkin montó de nuevo la película con las tomas dobladas. Es consciente que El exorcista es una película inquietante y compleja, por eso no es para niños. Recomienda que para verla se tengan al menos 17 o 18 años.

"Aquí el auténtico divo, al menos en esta edición del Festival de Sitges, es William Friedkin"

Sobre su otro gran éxito, The French Connection, nos explica que Fernando Rey llegó a la película por error. Viendo Belle de Jour le gustó ese actor español que aparecía con barba de cuatro días, así que investigó quién era y le contratató. Cuando fue a buscarlo al aeropuerto de Nueva York y apareció Fernando Rey, se quedó estupefacto. Había habido un error: el actor que él quería era Paco Rabal. A Fernando Rey no le conocía y parecía un noble de la aristocracia, así que tuvo que adaptar el papel de narcotraficante corso a su personalidad. Rodaron con él la película y resultó genial. Una de las muchas casualidades que crean la magia del cine. "Hay un Dios de las películas", afirma Friedkin, "y ese dios de las películas me dio a Fernando Rey".

 

WILLLIAM FRIEDKIN

"El mismo dios que le dio Adam Sandler a Little Nicky"

 

Y William Friedkin, cada vez más encantado, nos da su visión de lo que él considera el buen cine, rechazando la década de los 70 pese a pertenecer a ella y existir otros directores como Martin Scorsese, Francis Ford Coppola o Michael Cimino. Como ejemplos de los años 20 nombra a Buster Keaton, Charles Chaplin y D.W. Griffith ("nadie ha hecho mejores películas que ellos"); de los 40 y 50: Orson Welles, William Wellman, John Ford, George Stevens, Joseph L. Mankiewicz y Elia Kazan ("estos son los gigantes"); de los 60: Sidney Lumet, Franklin Schaffner, Roy George Hill, John Frankenheimer, John Huston y Richard Brooks ("estaríamos todo el día mencionándolos")... Conclusión: "no me hablen de los 70, cuando alguien me habla de las películas de los 70... ¡me duermo!"

Y así llegamos al final de la rueda, pero como le encanta que le pregunten, no deja que ésta se termine, y obliga al director del festival Ángel Sala a continuarla. Nos confiesa así que el cine de hoy en día no le interesa porque todo son "películas con tipos con máscaras y mallas salvando el mundo como Batman, Iron Man y ´Stupid Man', que son como opio para los ojos", y aún se permite abrir un coloquio sobre el proceso de independencia de Catalunya. "El referendum es ilegal, pero la revolución americana también lo fue. Los ingleses enviaron barcos, mucha gente murió, y América tomó las armas", explica, aunque enseguida pega un volantazo abogando por la paz. "Ha de haber un camino para la paz a través del diálogo", y así concluye la rueda, aunque sólo cuando él la da por concluida: "Que dios os bendiga a todos".

 

 

WILLLIAM FRIEDKIN

William Friedkin exorciza el Diario de Venusville

 

■ SITGES 2017

 

Facebooktwittermail

No hay comentarios

Agregar comentario