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REY ARTURO: LA LEYENDA DE EXCALIBUR crítica: RocknRolla artúrico

Guy Ritchie convierte al rey Arturo en un mafioso en Rey Arturo: La leyenda de Excalibur

RAY ZETA

Película de Guy Ritchie de mafiosos de poca monta del extrarradio de Londres que regentan burdeles, organizan timbas de dados, cobran comisiones de todo lo que se cuece en la zona, y controlan el barrio a base de hostias... ¿Estamos hablando de Lock & Stock, quizás? No señores. ¿De Snatch: Cerdos y diamantes, entonces? Tampoco. Entonces debe ser de RocknRolla… Podría ser, porque quienes mueven el cotarro son tres amigos muy amigos, pero tampoco. Estamos hablando de Rey Arturo: La leyenda de Excalibur. ¿De Rey Arturo? Sí señores, de Rey Arturo, porque lo que ha hecho Guy Ritchie con esta película es llevarse la leyenda artúrica a su terreno, que no es otro que el de los hampones londinenses, por mucho que la peli esté ambientada en época medieval.

Los más puristas se tirarán de los pelos, pero no pongan esa cara que aún así el film mantiene todos los elementos de la leyenda artúrica aunque estén puestos como si el abuelo Cebolleta contara una batallita hasta arriba de chinchón. En este caso el noble rey Uther es destronado por su malvado hermano Vortigern, quien esconde alguna sorpresita… Arturo es un niño que vive en un burdel de Londres (perdón, Londinium en plan Astérix), estudia para mafioso, se gradúa con calificación cum laude, se convierte en un mocetón fuerte y sano que en vez de apuntarse al gimnasio frecuenta una escuela de peleas orientales a lo Shaolín (aunque con una sola cámara y no 36) , y cuando descubre que es el legítimo rey de Inglaterra al sacar Excalibur de la piedra, pretende el trono con la ayuda del pueblo.

 

Rey Arturo: La leyenda de Excalibur

“Espero que después de esto no me encontraré a los Caballeros que dicen Ni”

 

Sí, lo sé, nada que ver con la respetuosa pulcritud de Los caballeros del rey Arturo, Camelot o Excalibur. Aquí no hay caballeros como Lancelot, reinas Ginebras, magos Merlins ni Santos Griales, pero es que ni falta que hace. En realidad si en vez del rey Arturo nos dijeran que el protagonista se llama Robin Hood, Ivanhoe, Guillermo Tell o Perico de los Palotes, la película funcionaría perfectamente, porque es más una película de Guy Ritchie que del rey Arturo, y un Guy Ritchie en estado de gracia que por fin se saca las orejas de burro que le pusimos tras la ridícula y fallida Operación U.N.C.L.E. Una película de Guy Ritchie cercana a las dos de Sherlock Holmes pero más ambiciosa en la puesta de escena, secuencias de acción y escenas de masas.

“Guy Ritchie se ha llevado Rey Arturo: La leyenda de Excalibur a su terreno, que no es otro que el de los hampones londinenses, por mucho que la peli esté ambientada en época medieval”

Vean cómo Ritchie narra en un frenético montaje cómo el niño Arturo se convierte en hombre a medida que va aprendiendo los trucos de la calle, cómo cuenta episodios de la película a base de diálogos en los que introduce planos cortos a modo de flashbacks, y cómo utiliza el mismo recurso en episodios con diálogos anticipativos. Es Guy Ritchie en estado puro, así que el que le tenga manía al ex de Madonna, o no soporte sus tics fílmicos practicados en los títulos citados de su filmografía, que huya de este Rey Arturo y corra a ponerse El primer caballero para ver a Richard Gere haciendo el ridículo interpretando a Lancelot con los mismos andares chulescos con los que se pavoneaba en American Gigolo y Oficial y caballero.

 

Rey Arturo: La leyenda de Excalibur

"Si Gerard Butler no está disponible, que Guy Ritchie cuente conmigo para RocknRolla 2"

 

Aparte de eso, como Rey Arturo: La leyenda de Excalibur es una peli de aventuras medievales que entra dentro del género de la espada y brujería, también tiene sus batallitas como las tienen El señor de los anillos o Juego de tronos, sus héroes y sus villanos (un carismático Charlie Hunnam anacrónicamente vaciletas, y Jude Law como la versión seria del Brujo Pirulo, respectivamente), sus magos (además del citado Law, Astrid Bergès-Frisbey convenientemente afeada para la ocasión), sus monstruitos (desde gratuitas serpientes gigantes hasta alguna sorpresita más), sus espaditas mágicas (Excalibur, of course, ¿cuál si no?, con poderes que recuerdan a los del Anillo Único), y sus duelos finales (no lo aceptaríamos de otra manera). Lo que no tiene son subtramas amorosas, y saben qué, tampoco se echan en falta porque con lo que tenemos vamos más que sobrados.

Rey Arturo: La leyenda de Excalibur, por sus variaciones con la leyenda original, sus anacronismos gangsteriles, y el estilo Guy Ritchie, no tiene término medio y será idolatrada u odiada a partes iguales. Su propuesta original y valiente seducirá a los antiacadémicos abiertos de mente e irritará a los arturianos puristas más carcas. Mientras los primeros ya estamos esperando ver qué hace Guy Ritchie con la versión real de Aladdin, los segundos clamarán al cielo e intentarán hackear las bases de datos de Imdb, Metacritic y Rotten Tomatoes para que Excalibur conste como mejor película por delante de El padrino, Casablanca y Ciudadano Kane. Como si no se rieran a carcajadas con Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores de Monty Python…

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Copas de yate

INF VNV 4

Recomendada por Kuato a: quien aún esté esperando la prometida y esperada segunda parte de RocknRolla.

No recomendada por Kuato a: quien con Lock & Stock, Snatch y RocknRolla ya tenga suficientes pelis de mafiosos de Guy Ritchie. Este Rey Arturo completa la tetralogía.

Ego-Tour de luxe por: esas escenas contadas a base de diálogos chulescos con flashbacks cortos, tan marca de la casa guyritcheana.

Atmósfera turbínea por: el cameo de David Beckham, tan gratuito como innecesario. Si quiere dedicarse al cine que se deje de chorradas y haga el remake de Evasión o victoria.

 

REY ARTURO: LA LEYENDA DE EXCALIBUR. “King Arthur: Legend of the Sword” (2017). Director: Guy Ritchie. Reparto: Charlie Hunnam, Astrid Bergès-Frisbey, Idris Elba, Eric Bana, Jude Law, Djimon Hounsou y David Bekham. Estreno en Venusville: 11/08/2017.

 

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