NACIÓN CAUTIVA crítica: V sin lagartos

Ciencia ficción con invasión extraterrestre sin extraterrestres lagartos, en Nación cautiva

¿Se puede hace una peli de extraterrestres sin que salgan extraterrestres? Yes we can! El mismo Nacho Vigalondo se encargó de demostrarlo en su comedia Extraterrestre, pues el único extraterrestre que salía es el que se lee en el título. El caso de Nación cautiva no es tan extremo como el de la peli de Vigalondo, pero no crean que se diferencie mucho, pues los únicos aliens que salen en la nueva propuesta de Rupert Wyatt lo hacen en dos momentos contados y pasando tan rápidamente como Flash meándose. Y eso que la peli va de que la Tierra ha sido invadida por extraterrestres, y estos dirigen el planeta con todos los países del mundo pasándoles cuentas como nuevos jefes.

Pero lo que cuenta en Nación cautiva no es la invasión alienígena como hace por ejemplo Independence Day, sino cómo pequeños corpúsculos de la población se organizan a modo de Resistencia, actuando en forma de guerrilla urbana llamando a la revolución. Algo así como la serie V pero sin lagartos, obteniendo una peli de ciencia de ficción que busca más la línea de thriller político de espías que plasmar una marcianada, valga la redundancia. ¿El resultado? Un ladrillo de tomo y lomo que se toma demasiado tiempo presentando la preparación de acciones que no llegan a ninguna o a casi ninguna parte, con unos personajes más sosos que un barbapapá sin colorines.

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Acciones de guerrilla urbana combinadas con tramas personales de culebrón y tópicos del género (el trauma arrastrado por la muerte de los padres, la ausencia del hermano, la imposición de llevarse a la suegra de vacaciones) que no acaban de enganchar en ningún momento, y que se hacen tediosas de tanto ir y venir de aquí para allá como un pollo sin cabeza. Por no mencionar que la invasión alienígena es sólo un pretexto, pues la película sería exactamente la misma si en lugar de extraterrestres, el enemigo a combatir fuera una ocupación militar, un gobierno cabrón, o una horda de fans del director Uwe Boll cabreados.

“Los únicos aliens que salen en Nación cautiva lo hacen en dos momentos contados y pasando tan rápidamente como Flash meándose”

John Goodman está en las antípodas de sus papeles de comedia (Pedro Picapiedra que estás en los cielos), y defiende su marmóreo personaje de poli colaborador, más por tablas que por guión. En cambio, el joven prota Ashton Sanders no logra transmitir ninguna empatía, como tampoco lo hacen el resto de actores secundarios, obteniendo en conjunto un reparto coral más frío que el pingüino Chilly Willy sin gorro y sin bufanda, tanto a nivel personal como colectivo. ¿Recordará alguien algún personaje secundario tras el visionado? Ya les digo yo que no, incluso no esperen gran cosa de Vera Farmiga porque sale tanto como los aliens.

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Alguna cosilla hay a modo de elemento fantástico, aunque no sea la panacea de la originalidad, como el implante identificador, visto ya en mil y un títulos, sin necesidad aquí de sacárselo introduciéndose una pistola por la nariz como en Desafío total; los mismos aliens que salen de refilón, cuyo diseño recuerda en cierta manera al de los monstruitos de Un lugar tranquilo, aunque a diferencia de estos se muevan tan lentos como un zombie de George A. Romero; y la manera de llegar hasta el ovni madre, con puntos que recuerdan La llegada (ya ven que por encontrar similitudes con otras pelis, no queda).

Les diré que acaso lo mejorcito y más sorprendente de la cinta es el final, con un último plano que obliga a replantearse todo lo visto hasta el momento, y que reconcilia en parte al espectador con el personaje de John Goodman, aunque no sea suficiente para reconciliarle con el resto de la película. Más le hubiera valido pues a Rupert Wyatt continuar con las aventuras del simio César en lugar de iniciarlas sólo en El origen del planeta de los simios y pasarse a la ciencia ficción ladrilla. Para peli con aliens divertida ya tenemos Independence Day y para peli seria La llegada, y Nación cautiva no consigue ser ni una ni la otra.

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Congelada en carbonita

Recomendada por Kuato a: quien en una sopa de pescado no le moleste no encontrar pescado.

No recomendada por Kuato a: quien quiera la sopa de pescado sin caldo, sólo con pescado.

Ego-Tour de luxe por: el final, aunque sólo sea un minuto de 109.

Atmósfera turbínea por: que pese a ir de una invasión alienígena, salgan tan pocos aliens como en un drama histórico de James Ivory.

■ NACIÓN CAUTIVA. "Captive State" (2019). Dirección: Rupert Wyatt. Guión: Erica Beeney, Rupert Wyatt. Reparto: Jonathan Majors, John Goodman, Vera Farmiga, Machine Gun Kelly, D.B. Sweeney, Ashton Sanders, Kevin Dunn, Lizzy Leigh, Daniel Craig Baker, José Antonio García, Brian Wolfman Black Bowman, Marc Grapey, Ralph Abbas, Giota Trakas, Otis Winston. Estreno en Venusville: 09/10/2020.