SITGES 2020 crónica final: Palmares y reflexiones pandémicas

Reflexiones pandémicas, balance final, palmarés venusvillero, palmarés oficial... ¡y hasta 2021!

■ CHEMA PAMUNDI

No me apetece que el balance de Sitges 2020 se centre en volver a decir lo que todo el mundo (incluso yo mismo) ha estado repitiendo durante estos diez días: que ha sido muy complicado, que es un milagro que se haya podido celebrar, y bla, bla, bla. Prefiero prestar atención a las cosas positivas que ha descubierto esta edición y que deberían convertirse en un estándar de futuro. Como por ejemplo las sesiones con butacas numeradas, una auténtica bendición (al director Ángel Sala siempre le ha parecido que las colas a la entrada de los cines daban mucho ambiente, pero dejémonos de tonterías); o los cincuenta minutos de margen entre sesión y sesión (a fin de poder airear y desinfectar las salas), que han facilitado a todos los acreditados combinar películas sin que se nos solaparan, y hacer cosas como comer en condiciones, descansar o adelantar trabajo escrito; o la selección de películas que podían verse online a 6€ cada una, una iniciativa que ha funcionado de coña, ha internacionalizado aún más el certamen y ha permitido a muchos recuperar títulos que se nos habían escapado en los pases presenciales (así fue como pude ver Post Mortem, por ejemplo). Todo eso ha hecho que, en algunos aspectos, esta edición del Festival de Sitges haya sido, menuda paradoja, la más cómoda y agradable de toda su Historia.

 

A punto para el palmarés

 

Películas que no he reseñado por falta de tiempo y que tienen cierto interés: Sputnik (cinta rusa de parásito alienígena, con un arranque que recuerda a La llegada y un bicho sensacionalmente lovecraftiano, aunque hacia la mitad pierda fuelle y tenga un desenlace tópico de blockbuster), My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To (intenso drama vampírico desde un prisma familiar hiperrealista), The Old Ways (buen tebeo de exorcismos, un poco largo pero con una ecología muy molona), Black Bear (dramedia meta-narrativa sobre personajes en crisis que discuten y se ponen los cuernos unos con otros, con un giro de la leche a media película, unos diálogos muy bien escritos... y Aubrey Plaza), Post Mortem (cuentecillo húngaro de fantasmas durante la gripe española de 1918, que no consigue dar ni un puñetero susto pero tiene una trama súper entretenida), Historia de lo oculto (extrañísima película argentina en blanco y negro, con una idea conspiranoica de fondo tremebunda y una forma muy original de contarla), o May the Devil Take You Too (secuela de May the Devil Take You, una especie de Posesión Infernal a la indonesia igual de borrica y divertida que la primera parte).

Y películas que no he reseñado y de las que hay que huir a toda costa: L’etat sauvage (mezcla de western y melodrama absolutamente tedioso, pedante y ridículo), The Toll (un inicio inquietante con una chica que sospecha que su taxista puede ser un psicópata, y un desarrollo que se va yendo al cuerno a medida que entra en juego lo paranormal, hasta acabar de manera tramposa y cutre), Sleepless Beauty (es como la escena de torturas de Martyrs pero alargada durante hora y pico sin contexto, sin gracia y sin sentido), Saint-Narcisse (psicotrónica y acartonada oda al amor libre y la filosofía queer en forma de culebrón insufrible), Cosmogonie (survival horror cuyo guion no debería de haber sobrevivido para ser filmado), Kola Superdeep (mezcla rusa de Aliens y La cosa rodada con el mismo presupuesto que una película de Troma y bastante menos talento y sentido del ritmo).

 

Jurado 2020

 

EL PALMARÉS DE SITGES 2020

Que Possessor iba a coronarse como mejor película (siempre que su calidad lo justificase un poco, claro), ni cotizaba en las apuestas. Es uno de esos títulos que prestigian y otorgan eco mediático a un festival como éste; y, ya puestos, también era lógico que Brandon Cronenberg saliera elegido mejor director. Aunque en Sitges no sea común concentrar los dos premios gordos en una misma producción, poder establecer la “conexión Cronenberg” (el padre de Brandon, David, fue reconocido en la edición de 1975 por Vinieron de dentro de... y en la de 2002 por Spider) era demasiado bonito como para no hacerlo. Pero es que, además, Possessor no ha tenido apenas competencia en la sección oficial.

No puedo opinar sobre la otra película que ha hecho doblete, La Nuée, porque es una de las que se me escapó. No obstante, ha sido quizás el título que más ha sorprendido (para bien), una de esas cintas desconocidas que muchos espectadores y acreditados acudieron a ver simplemente porque les cuadraba para rellenar parrilla, y de la que salieron mucho más contentos de lo que esperaban. Así que el Premio especial del jurado y el de Mejor actriz parecen plenamente justificados.

 

Possessor, vencedora oficial

 

Convence bastante menos la elección de mejor actor ex aequo para David Marsais y Grégoire Ludig, los dos protagonistas de Mandibules (sobre todo cuando los propios miembros del jurado reconocen que los eligieron porque “querían darle algo” a la peli de Quentin Dupieux). Atendiendo a méritos exclusivamente cinematográficos, quizás el galardón debería haber sido para Christopher Abbot por su descomunal y dificilísima interpretación en Possessor, pero supongo que otorgarle tres premios a dicha película era ya demasié.

Entre los títulos que se van de vacío y que, para quien esto escribe, hubieran merecido rascar algo, están sobre todo Saint Maud, Rent-A-Pal (les mangó a ambas el premio de la sección Noves Visions My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To) y Come True (cinta muy polarizante en cuanto a su calidad global, pero que ha llamado la atención en unos cuantos apartados: música, fotografía, actriz principal...).

*Ver el palmarés completo al final de este artículo.

 

EL PALMARÉS DE DIARIO DE VENUSVILLE 2020

Mira tú si ha justeado la cosa fílmica este año, que he sentido tentaciones fuertes de reducir el clásico Top 10 venusvillero a un simple Top 5. Sin embargo, eso dejaba fuera un par de películas que sí merecían ser citadas; y como un Top 7 quedaba raro, al final he hecho de tripas corazón y he logrado estirar el asunto hasta llegar al número redondo habitual. Ninguno de estos largometrajes es perfecto ni va a representar un cambio de paradigma en el género, pero ninguno de ellos es tampoco una pérdida de tiempo.

10. Mandibules, de Quentin Dupieux.

9. Possessor, de Brandon Cronenberg.

8. The Dark and the Wicked, de Bryan Bertino.

7. The Stylist, de Jill Gevargizian.

6. For the Sake of Vicious, de Gabriel Carrer y Reese Eveneshen.

5. The Education of Frederick Fitzell, de Christopher MacBride.

4. Amulet, de Romola Garai. 3.

Come True, de Anthony Scott Burns.

2. Rent-A-Pal, de Jon Stevenson.

1. Saint Maud, de Rose Glass.

Y con esto, nos despedimos definitivamente de Sitges 2020. Como de costumbre, gracias por dar sentido a nuestro trabajo con vuestras lecturas. Ha sido cansado, pero ha sido un gustazo, y desde este mismo instante empezamos a fantasear con un Sitges 2021 que, esperemos, se celebre en un mundo un poco menos parecido a las propias películas que proyecta el festival.

 

Saint Maud, vencedora venusvillera

 

PALMARÉS OFICIAL

SECCIÓN OFICIAL FANTÁSTICA A COMPETICIÓN

Mejor película
Possessor Uncut (Brandon Cronenberg) 

Premio especial del jurado
La nuée de/by Just Philippot     

Mejor dirección
Brandon Cronenberg (Possessor Uncut)

Mención a la dirección
Natalie Erika James (Relic)

Mejor interpretación masculina
Grégoire Ludig & David Marsais (Mandibules)

Mejor interpretación femenina
Suliane Brahim (La nuée)

Mención a la interpretación femenina
Marin Ireland (The Dark and The Wicked)

Mejor guion
Márk Bodzsár, Juli Jakab & István Tasnádi (Comrade Drakulich)

Mejores efectos especiales
Maks Naporowski, Filip Jan Rymsza, Dariush Derakhshani (Mosquito State)

Mejor fotografía
Tristan Nyby (The Dark and The Wicked)

Mejor música
Bingen Mendizábal & Koldo Uriarte  (Baby)

Gran Premio del público a la mejor película         
La vampira de Barcelona (Lluís Danés)

Mejor cortometraje de género Fantástico
The Luggage (Yi-fen Tsai)

Mención al  cortometraje
Rutina: La prohibición (SAM)

 

NOVES VISIONS

Mejor película
My Heart Can't Beat Unless You Tell It To (Jonathan Cuartas)

Mención a la película
El elemento enigmático (Alejandro Fadel)

Mejor dirección
Laura Casabé (Los que vuelven)

Mejor corto Noves Visions Petit Format       
Luz Distante - Parte 1, Les desventurades (Santiago Reale)

 

MIDNIGHT X-TREME

Premio del público a la mejor película
The Queen of Black Magic (Kimo Stamboel)

 

SITGES DOCUMENTA

Premio a la mejor película      
Ivan, O Terrível (Mario Abbade)

 

BLOOD WINDOW

Premio Blood Window
Marea alta (High Tide) de/by Verónica Chen

 

JURADO DE LA CRÍTICA

Premio de la Crítica José Luis Guarner  
Teddy (Ludovic Boukherma & Zoran Boukherma)         

Premio Citizen Kane a la dirección revelación  
Jonathan Cuartas (My Heart Can't Beat Unless You Tell It To)

 

MÉLIÈS D'ARGENT

Premio al Mejor Cortometraje
Dar-dar

Premio a la Mejor Película
Le dernier voyage de Paul W.R

 

CARNET JOVE

Premio Jurado Carnet Jove al mejor largometraje de género fantástico        
She Dies Tomorrow (Amy Seimetz)       

Premio al mejor largometraje de animación     
Seven Days War (Y?ta Murano)

Premio al mejor cortometraje de animación
Red Rover (Astrid Goldmisth)

 

BRIGADOON

Premio Brigadoon Paul Naschy     
Horrorscope (Pol Diggler)

 

...Y hasta el año que viene. ¡Togooooooo!

 

■ SITGES 2020