SITGES 2021 crónica 7: Amenazas en la sombra

Last Night in Soho; Here Before; Hellbender; Silent Night

■ CHEMA PAMUNDI

Tienen un punto cómico las diferencias abismales de gusto y criterios entre los diversos acreditados del festival, y no me refiero tanto a la gente de medios grandes y generalistas, sino a las webs, los blogs, los podcasts y los canales de YouTube que informamos específicamente sobre cine fantástico. Hoy he visto una película, Last Night, que me ha parecido un espanto pero en cambio ha gustado a casi todo el mundo, y otra, Hellbender, con la que me ha ocurrido justo lo contrario. En Venusville incluso hemos acuñado el término “La magia del cine” para referirnos a este fenómeno que hace que, si juntas a tres fans del fantástico a la salida de cualquier pase, es bastante probable que obtengas tres opiniones casi opuestas sobre lo que acaban de ver. Resulta curioso que los aficionados al género coincidamos tantísimo al hablar de los clásicos que nos flipan (El exorcista, La cosa, Matrix…) y en cambio apenas nos pongamos de acuerdo con la película que acabamos de ver hace una hora.

De todos modos, cada año repito por aquí que hay que disculpar a cualquiera que venga a cubrir el Festival de Sitges y se vea obligado a publicar reseñas en caliente, basadas en primeras impresiones que en muchos casos no hacen justicia a la cinta en cuestión, dado que no ha tenido tiempo de digerirla ni para bien ni para mal; y lo que más me flipa de esto es seguir viendo a gente engancharse a discutir en redes sociales como Twitter, cuando se emiten opiniones con las que no se está de acuerdo. Enfadarnos por películas que hemos visto con falta de sueño y en un pase de madrugada no tiene el menor sentido. Por tanto, tanto estas crónicas venusvilleras como las de cualquier otro medio deben tomarse más como una guía de títulos que pueden ser interesantes, que como verdades grabadas en piedra. No me hago responsable de que una película que he puesto mal aquí, de pronto me guste cuando la revise dentro de 6 meses tranquilamente en mi casa, bien dormido, bien cenado y bien cagado.

Y las cuatro pelis sobre las que estoy equivocado hoy, son...

 

LAST NIGHT IN SOHO (Edgar Wright, Reino Unido, 2021)

Trailer, fotos, sinopsis y ficha

Probablemente Edgar Wright nos va a gustar siempre. La “trilogía del Cornetto” (Zombies Party, Arma fatal y Bienvenidos al fin del mundo) es una de esas obras de la cultura popular que te dan crédito de por vida. Pero, además, hay que alabarle que no se haya quedado enganchado en intentar replicar ese tipo de éxito, algo que, dado su talento para escribir guiones graciosos, posiblemente no le hubiera costado mucho. No, Wright ha mostrado a lo largo de toda su carrera la ambición de evolucionar hacia obras más complejas y exigentes. Aquí lo hace de nuevo, y aunque el conjunto sea un batiburrillo rebuscadísimo de comedia, terror y drama que se queda corto en los tres géneros, el riesgo y los hallazgos visuales de la propuesta acaban parando el hostión lo suficiente como para que la disfrutes si no te pones de lo más exigente.

La película sigue las desventuras de Eloise (Thomasin McKenzie), una joven de pueblo que se acaba de mudar a Londres para estudiar moda. Eloise está obsesionada con la música y la estética de la década de los 60, hasta el punto de que cada noche, cuando se duerme, se ve transportada hasta esa época en una especie de trance autoinducido, y se mete en la piel de Sandy (Anya Taylor-Joy), una aspirante a cantante que parece ser todo lo que Eloise siempre ha querido ser. No obstante, a medida que pasa el tiempo, Eloise empieza a darse cuenta de que igual Sandy no es una invención de su mente sino alguien que vivió realmente y que tiene una historia menos glamurosa de lo que parecía.

 

"Corramos antes de que Nick Frost salga pidiendo perdón por tirarse un pedo"

 

Last Night in Soho engaña, o más bien mantiene la magia, gracias a una fotografía magnética que desarrolla algunas ideas visuales maravillosas (Eloise reflejándose en los espejos como Sandy), un departamento artístico muy inspirado a la hora de reproducir los “locos sesenta” londinenses con precisión milimétrica, y un papelazo fuera de serie a cargo de Anya Taylor-Joy. Sin embargo, sus partes de comedia son más bien tontainas, sus elementos de terror se quedan a años luz de la efectividad del giallo al que pretenden emular, y su núcleo de drama sobre los peligros de idealizar el pasado tiene la intensidad de una telenovela, sobre todo a medida que va avanzando y aparca lo onírico en favor de una rocambolesca investigación paranormal, que además se resuelve de un modo muy tópico. En global, Last Night in Soho no acaba de funcionar, pero cae bien.

 

Venusentencia: Dos Caras Harvey

 

 

HERE BEFORE (Stacey Gregg, Reino Unido, 2021)

Trailer, fotos, sinopsis y ficha

¿Pero por qué hacen esto? ¿Qué necesidad había de estropear un thriller psicológico que estaba resultando de lo más intrigante, con ese final sorpresa infame? ¿Y qué hostias pasa con los finales sorpresa, ya que estamos? ¿Es que no sabemos acabar una película de terror sin cambiarle el paso a la audiencia? ¿Acaso preferimos un mal final sorpresa que cualquier final convencional, por bueno que sea? Le he dado muchas vueltas a diferentes maneras en las que la vuelta de tuerca que cierra Here Before podría encajar, y no se me ocurre ninguna.

La protagonista de Here Before, Laura, casada y con un hijo preadolescente lleva una vida ordenada y sin sobresaltos en las afueras de una localidad norirlandesa. Laura lo hace todo un poco a cámara lenta, como si estuviera desperezándose después de haber hibernado durante mucho tiempo. Pero esa vida se vendrá abajo cuando, un buen día, empiece a sospechar que la hija de los vecinos es la reencarnación de la suya propia, que falleció algunos años atrás en un accidente de coche. La propia Laura reconoce que es una idea loquísima, pero todas las señales que manda la niña la conducen hacia allí.

 

"Suerte que en Mandy no tenía hijos"

 

Andrea Riseborough interpreta a Laura y compone, como de costumbre, un personaje excepcional, que habla poco pero solo necesita una mirada para transmitir todo el estupor, el dolor y la furia del mundo. El resto del reparto también está muy fino (sobre todo los dos niños), pero la película es sobre todo de ella. Durante setenta y cinco minutos, Riseborough propulsa Here Before hacia adelante con su energía contenida y sus ojos como platos, a ratos recordando al Donald Sutherland de Amenaza en la sombra de Nicolas Roeg… y entonces llega EL GIRITO, y la cinta se estrella con estrépito (en el pase de la sala Tramuntana se han oído incluso risitas ahogadas).

La directora y guionista Stacey Gregg, que debuta con Here Before, demuestra muy buena mano para mezclar las claves del cine de terror y del drama meditativo (hay varias escenas de una sutileza brillante, como una escalofriante revelación de la niña durante un paseo casual en coche, o un extraño sueño de la protagonista que provoca a la vez ternura, tristeza y espeluzne sin recurrir al sobresalto), pero le queda margen de mejora en lo que se refiere a cerrar sus guiones, porque desde luego el destrozo que ha hecho aquí no tiene nombre.

 

Venusentencia: Dos Caras Harvey

 

 

HELLBENDER (John Adams, Zelda Adams y Toby Poser, EUA, 2021)

Trailer, fotos, sinopsis y ficha

Antes de ver Hellbender no conocía la existencia de la llamada “Familia Adams”, un colectivo formado por padre, madre y dos hijas que hace diez años crearon una productora (Wonder Wheel) en la que autofinancian, escriben, dirigen, protagonizan, montan y distribuyen sus propias películas de terror. Bueno, pues ya vista Hellbender, me declaro fan total de los Adams. Hacía tiempo que no veía algo con semejante nivel de carisma, inteligencia, ambición y mojo, hecho con tan poco dinero.

Hellbender es un drama sobre una mujer (Toby Poser) que vive en los bosques de las montañas Catskills con su hija adolescente, Izzy (Zelda Adams). Ambas llevan una vida sencilla pero feliz, lo hacen todo juntas y tienen incluso su propio dúo de música punk. El asunto es que la madre es bruja, y está tratando de proteger a Izzy manteniéndola aislada del mundo exterior a la vez que le transmite sus conocimientos de magia negra. Sin embargo, Izzy acaba de entrar en esa edad en la que justamente lo que más quiere es conocer ese mundo exterior y relacionarse con otra gente de su edad. Este choque de intereses generacionales llevará a madre e hija por un camino oscuro.

 

"Si somos la familia Addams, me pido a Miércoles"

 

Película arquetípica de “entrada en la edad adulta” (qué mala traducción tiene el término en inglés “coming of age”…), que sabe sacar petróleo de su atractiva estética grunge, su banda sonora de indie rock (las canciones, de temática brujil, chamanística y apocalíptica, también han sido compuestas e interpretadas por las propias actrices) y unos efectos especiales y de maquillaje de una calidad que desafía el bajo presupuesto con el que sin duda ha sido hecha la película.

La fotografía también es muy destacable: sus colores quemados, hasta el punto de ennegrecer y mezclar el rojo de la sangre y el marrón de la tierra o la madera, contrastan con el verde luminoso de la vegetación y el blanco de las caras, ayudando a remarcar tanto las emociones de los personajes como la extrañeza del entorno. Aparte de eso, la película trata la brujería con un mimo por el detalle y una sensación de verosimilitud que solo se rompe en algunos trucajes puntuales, un punto pirotécnicos pero siempre orgánicos y molones. Hellbender es pura magia (negra) invocada por cuatro duros.

 

Venusentencia: Copas de yate

 

 

SILENT NIGHT (Camille Griffin, Reino Unido, 2021)

Trailer, fotos, sinopsis y ficha

Una cosa, amiguitos: reseñar esta película sin reventar al menos en parte su trama es misión imposible. Voy a contar lo mínimo imprescindible para argumentar mi opinión, siendo todo lo inconcreto que pueda, pero cualquiera que se muera por verla debería saltarse la presente crítica y pasar a la siguiente. En la valoración ya queda claro lo que me ha parecido.

Ok, pues ahora que estamos ya más recogiditos, sigamos. La frase “Vámonos de fiesta como si se acabara el mundo” se convierte literalmente en el argumento que vive el grupo de amigos protagonistas de Silent Night (varias parejas, algunas con hijos), aunque en este caso lo de “irse de fiesta” se limite a pasar una velada navideña en una gran casa de campo, con cenorrio, baile, partida de Scrabble y cuatro reprochitos del pasado regados con licor. Si le gustó Melancolia de Lars Von Trier pero le pareció, uf, demasiado rara, se lo pasará pipa con esta especie de versión telefilme de media tarde, que le quita toda la intensidad emocional a cambio de media docena de chistes que parecen descartes del guion de Los amigos de Peter.

Nunca un fin del mundo pareció menos amenazador. Aunque por suerte en la película salen niños, que oye, ver a los niños pasarlo mal siempre lo pone a uno triste. Bueno, en realidad todos los niños que salen son bastante gilipollas, pero hay uno (interpretado por Roman Griffin Davis, el de JoJo Rabbit) que no solo es un amor sino que parece ser el único personaje de la cinta, adultos incluidos, que tiene un cerebro funcional y una dimensión humana verosímil (el resto son estereotipos tan de una sola nota, que ni siquiera te explicas en base a qué coño son amigos). Así que, cuando el niño éste tan listo sufre, nosotros sufrimos con él. En fin, más o menos.

 

"Lo que realmente celebramos es el fin de la saga Piratas del Caribe"

 

Según parece, el mérito arrebatador de Silent Night (he interrogado al respecto a algunos de sus fans, porque aquí ha gustado bastante en general), es que tiene una primera parte de comedia navideña conversacional y una segunda parte que cede el terreno a la desesperanza y el thriller psicológico. A mí me parece que, paradójicamente, cuando se convierte en un buen chiste es justo cuando intenta ponerse seria, y que su desarrollo sin sorpresas ni evolución le quita incluso cualquier razón de ser. ¿Qué nos está contando? ¿Que es mejor no morirse?

Silent Night está protagonizada por un elenco de actores y actrices de campanillas (Keira Knightley, Matthew Goode, Annabelle Wallis, Lily Rose Depp…) que están francamente bien encarnando a personajes con muy poco interesante que decir, en una cinta que es absolutamente nada y que, encima, tiene un mensaje de fondo hipercateto, que parece afirmar a la vez que estamos destruyendo el planeta y que los científicos son unos exagerados. O sea, el tipo de tontería que podría decir el cuñado borracho de cualquier fiesta.

 

Venusentencia: Congelada en carbonita

 

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