<Reseteen su mente. Si es necesario hasta les pagamos una visita a Memory Call para que les implanten un falso recuerdo o se la borramos como se la borran a Ben Affleck en Paycheck, porque hay una información que deben sustituir por otra en su cerebro: el actor elegido para dar vida a Eric Draven en el remake de El cuervo que prepara Francisco Javier Gutiérrez, no será Tom Hiddleston como anunciamos hace un par de semanas sino Luke Evans.
Ha sido un cambio de última hora comunicado por Relativity Media. La versión oficial que han dado es que Luke Evans había estado considerado desde el principio para el papel protagonista que inmortalizó Brandon Lee, pero que había sido descartado por problemas de agenda hasta que el actor ha encontrado un hueco en ella al que han podido adaptarse. La versión no oficial, mucho más probable, es que el productor Edgard Pressman nunca estuvo satisfecho del todo con la elección de Tom Hiddleston, así que ha tirado de hilos hasta conseguir un actor de su agrado.
Y no le culpamos, pues nosotros también preferimos mil veces más a Evans que a Hiddleston. A Tom Hiddleston le falta carisma para papeles protagonistas de enjundia, incluso para papeles secundarios de enjundia, como ha demostrado en Thor y Los Vengadores, que por mucho Loki que sea, cualquier actor que esté a su lado se lo come con patatas (hasta el pelendengue Chris Hemsworth; no digamos ya Anthony Hopkins o Robert Downey Jr.). En cambio Luke Evans, infinitamente más carismático, se está ganando el respeto de la crítica y el favor del público a base de ir afrontando papeles que saca a flote con gran seriedad y profesionalidad (no, no cobramos ninguna comisión de su representante), en títulos en los que la mayoría han acabado siendo éxitos comerciales como Robin Hood, Los tres mosqueteros, Furia de titanes o Immortals.
Y esperen, porque en breve estrena The Fast & The Furious 6 (en la que hace de villano), las dos secuelas de El Hobbit, y una nueva versión de Drácula que está en preproducción, lo que puede darle el espaldarazo definitivo para consagrarlo como una estrella. O sea, que entre Tom Hiddleston y Luke Evans no hay color, así que bien por el productor Edgard Pressman, bien por el director F. Javier Gutiérrez, y bien por este remake de El cuervo que sigue emprendiendo el vuelo con buenos aleteos./>
Luke Evans y El cuervo, unidos por el destino
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