TANYA ROBERTS noticia: Adiós a Tanya Roberts a los 65 años

Tanya Roberts muere a los 65 años por causas desconocidas descartándose el coronavirus

Tanya Roberts se desmayó en plena calle paseando a sus perros el pasado 24 de diciembre, la hospitalizaron, y tras una semana y media ingresada ha muerto a los 65 años sin que se haya dado a conocer la causa, pero descartando oficialmente que sea por coronavirus. Nunca fue una actriz con status de estrella de esas que acapara flashes, contratos millonarios y protagonismo de blockbusters, pero siempre conservará un lugar de honor en el corazón de los aficionados al cine fantástico por las pelis en las que intervino en los años 80.

Se hizo popular a raíz de su fichaje para la última temporada de Los ángeles de Charlie como sustituta de Shelley Hack, compartiendo charlieangelismo con Jaclyn Smith y Cheryl Ladd. Y tras aparecer en otras dos series míticas como Vacaciones en el mar y La isla de la fantasía, el primer bombazo cinematográfico: El señor de las bestias (1982). Subproducto nacido a la sombra de Conan, el bárbaro a cargo de Don Coscarelli, Top One del alquiler en los videoclubs de la época, tan entrañablemente cutre como irresistible. Placer culpable aún practicado, visionándose en una cinta VHS más gastada que el chiste de Jaimito y el perro “Mistetas”.

Sólo dos años más tarde volvió a tocarnos en la diana coronaria con Sheena, reina de la selva (1984), la tarzana creada por Edward Rice Burroughs, que cabalgando a lomos de una cebra con un bikini de piel que le hace la competencia a la misma Raquel Welch de Hace un millón de años, se erigió en la imagen estrella de las carpetas forradas de los adolescentes ochenteros. Y al año siguiente, la consagración: chica Bond en Panorama para matar (1985) dándole la réplica amorosa a un Roger Moore de casi 60 añazos, en la que sería la última peli Bond del actor. Su belleza, elegancia y fragilidad llevaron el “bondgirlismo” a unas cotas inimaginables hasta el momento.

A partir de ahí, la carrera de Tanya Roberts quedó relegada a un puñado de títulos cinematográficos sin importancia, hasta asentarse en la televisión, triunfando de nuevo desde finales de los 90 hasta mediados de los 2000 con la serie Aquellos maravillosos 70. Flojo final para unos principios tan prometedoras, que no evitará que para honrar su memoria a modo de homenaje, revisionemos El señor de las bestias, Sheena, reina de la selva y Panorama para matar seguidas.